viernes, 31 de octubre de 2014


El fósforo

Tal vez haga falta para encender una candela, un cigarrillo, incluso para encontrar el interruptor de la luz en la oscuridad, pero eso serían cerillas, mi abuela le decía mixtos, pero en realidad  se trata del elemento químico que refuerza la memoria.
La farmacopea moderna pone al servicio de la clase médica tal número de especialidades y combinaciones que convendría recetar alguna a la olvidadiza clase política.
En el asunto de la Encarnación,  cuyo argumento para eliminar la propuesta andalucista, rabitos de pasas, era que resultaba inconcebible un mercado tradicional, la plaza de abastos de toda la vida, en los sótanos de un laberíntico edificio de rampas y escalinatas.
De nada sirvió que, a última hora trataran de rectificar todo aquello en un programa incumplible, sacando de los sótanos, con un reformado de urgencias, el mercado, la plaza de abastos de toda la vida a la superficie. Tarde, mal y tarde.
No había lugar, el pacto de progreso ya estaba firmado. IU defensora de esta tradicional forma de comercio, miembro de la plataforma pro mercado, anti-Sótano, garantizaría que este, apoyando las manifestaciones del Alcalde, tanto cuando en la exposición dijo que aquello no le gustaba en un sótano, cuando lo de que a la Encarnación había que tratarla con mimo, y cuando rizando el rizo, y aquí está lo del fósforo para el olvido, aquello del mercado Emblemático.
¡¡¡ ZAS!!!. Concurso de ocurrencias, criterios a tutiplé. Mercado Emblemático cero cartón. Propuesta “NO-Do”, para esta seleccionada propuesta el mercado es un conjunto de locales desperdigados y para colmo bajo la rasante. Propuesta, “Il y aura l’age des choses lègéres”, crea un lugar en el que el mercado no es lo más importante, le sitúa en tres niveles, increíble pero cierto.
 Propuesta “Viridiana” al menos a este se le ve como una plaza de abastos con envoltorio de cristal y vegetación, y deja un gran espacio desolado, un verdadero horror. Proyecto “Umbrage” trata de crear un espacio sombrío con una increíble estructura aérea de hormigón y cristales de colores, no queda definido el mercado aunque lo establezca en la zona Norte, sin duda la menos comercial, y tendrán serias dificultades para sembrar un solo arbolito. Proyecto, “Estratos Históricos”, de difícil aceptación, al menos al mercado lo coloca en superficie, aunque no sea emblemático. Proyecto “This is tromorrow”, otro bajo tierra, y es que no se enteró el jurado. Proyecto "Relieve", sin comentarios. Proyecto “Metropol Parasol”, como lo creo irrealizable en el corazón de esta ciudad, ni a como sea, pero si me gustaría verle en algún lugar de Sevilla-Este. Proyecto “Sahel”, me pareció el techo de la jaima del pabellón de Emiratos árabes de la Expo, un zoco, cuando todos queremos ser europeos. Proyecto “Spatium”, este arrincona el emblemático mercado en el mismo lugar que está ese provisional, sin comentarios. Estos son los diez seleccionados, todo un fallo, ni me atrevo a pensar en fallo del ganador del "Emblemático Mercado", estacion de metro, proteccion de los restos arqueológicos, ordenación del trafico, y aparcamientos ..
El fósforo viene bien para la memoria, si esta se encuentra, aunque sea en mínimas dosis, alojadas en algún lugar de las olvidadizas cabezas.
Sevilla a 18 de Abril de 2004

Francisco Rodríguez Estévez
Los lobitos

Por el enorme agujero que la Encarnación tiene en el corazón se le está escapando la vida, y Cronos impasible no detiene el curso de su existencia. Treinta calendarios se ha tragado el boquete que quedó del desaparecido mercado municipal, del que solo quedaba su mitad, de aquel original, que ya sufrió mutilación.
 Ilusiones y trabajo de años se han desvanecido esperando ese Emblemático que nunca llega. No le cambió solo la fisonomía a este espacio del que las chapas que lo guardan es el síntoma de su gravedad. Al menos la falta de su bulliciosa plaza de abastos,  se ha convertido por suerte en valioso yacimiento, vestigios de un tiempo pasado que impidió que la convirtieran, después de todo lo pasado, en una galería comercial subterránea, pues en el transcurso del tiempo también cambiaron los edificios circundantes y con ellos la alegría comercial  que albergaba.
Mientras tanto los pacientes placeros con sus inexplicables silencios aguardan en la provisionalidad más vergonzante, y en  el exterior, el grito no se escucha cuando se siguen cerrando las pequeñas tiendas de toda la vida, y todo se está llenando de un increíble silencio en el peor de los vacíos, la soledad.
A Sosa comestibles y Lorenzo, al Grano de Anís y La Providencia ultamarinos, se le unió Carmen Navarro, la barbería de Patricio y la zapatería de Domingo y Emilio Romero.
 Casi de puntillas se va La Castellana y Fusión y ahora le tocó el turno a Juan Lobo. Los Lobitos, selecta mercería, que modificó hace años su estrategia comercial para especializarse en ropa infantil. Especializarse o morir. No le sirvió de nada, el cráter devoró sus ilusiones y su famoso sueño del eje comercial de Macarena a la Giralda, utopía de soñador pretérito que se esfuma en los recuerdos de una jubilación anticipada, forzada por los acontecimientos.
Los mismos que alcanzaron a Jomaga, Lucas, Luis Alonso, Rosarito, Orozco, Isan,  Rafael el calentero, Marroco, Fernando el confitero, Montaño, Joselito, Garrido, Mauri, y muchas tiendas más devoradas en el recuerdo. Ha sido demasiado tiempo esperando sin saber qué. Por el enorme agujero de la Encarnación se están escapando demasiadas vidas que aguantaron mucho más que lo que jamás se pudieron pensar, y que el enorme vacío, sangrante herida, se los ha ido tragando.

Francisco Rodríguez Estévez

-Sevilla 27 de Febrero 04
La mascota

La cabeza además de atesorar la mayor parte de los sentidos, encierra la racionalidad y el pensamiento en la mollera, razón de más para protegerla cubriéndola.
La cabeza pensante que razona y discurre una situación, obvia la fantasía en el método. La Encarnación, Hidra encefalopática, tiene tantas cabezas que parece que ninguna piensa, aunque a veces, a algunas, se les ocurren cosas.
La última ocurrencia ha sido lo de querer ponerle a la Encarnación una mascota, una moda que sirve para reconocer algo, y parece que el solar ya se merecía ser identificado, y lo mejor no ha sido pensar en construir, “chapeau”, hay que descubrirse.
Una idea elaborada con el sentido que da la mano, el del tacto, pero que es de quitarse el sombrero, vamos.
No aparece en las bases de este concurso, a diferencia del de ocurrencias arquitectónicas, el elenco de la nomina de componentes del jurado calificador, pero a tenor de lo especifico del tema, con toda seguridad este será evaluado por Padilla, Maquedano y Roche,, prestigio por montera, y de secretario Antonio García. Conocedores y expertos en mascotas, que encontraran entre las presentadas las cualidades que identifiquen a esta con la Encarnación.
Las mascotas tienen un leguaje de signos, tal vez la mejor opción pueda ser el catite, sobre pañuelo, tipo Curro Jiménez, que encarna el bandolerismo y el expolio. El cartón de capirote la humildad y el sacrificio. Pero por la severidad del asunto merecería premiarse el tricornio de charol, y por lo castigado que está el asunto el castoreño resultaría elegido. Por lo del mercado no estaría mal la mitra persa, y el tocado del Rey Baltasar por la experiencia política. El docto bonete, el elegante Panamá, el sobrio hongo, el emplumado tirolés, el brillante del clown, el andaluz de ala ancha, también llamado cordobés, el de copa, por las invitaciones, el jipijapa, el de teja, el calañés, el aventurero salacot, y el charlotesco bombín, no le andan a la zaga, en definitiva no será nada fácil determinar la mascota que cubra de ironía esta descubierta Encarnación, aunque el huchicol mexicano taparía bastante. El problema surge cuando se empeñan en llamar esta tapa cabeza, Encarna, así en femenino, en cuyo caso lo mejor sería premiar a la elegante pamela, o bien a la servil cofia. De todas maneras este asunto tiene el sentido del bravo bonete.
Parece que todo está que la lección sea un animal, y queda entre la resistente tortuga, y el deslizante caracol.
Sevilla a 7 de Febrero de 2004

Francisco Rodríguez Estévez

jueves, 30 de octubre de 2014

Historia real

Pasaron treinta años y estas son las consecuencias ya que se comprueba que la diagnosticaron mal.
Dos médicos uno para empezar, y otro que se ha propuesto acabar esta historia real. Fuel el diagnostico erróneo, cuando los médicos juegan a políticos y tratan la ciudad como pacientes, y prescriben tal que fueran enfermedades.
Dijeron que no estaba bien, y le realizaron una intervención municipal tan invasiva que acabaron con ella despiadadamente, con lo que podía haber sido y no hubo nada, treinta años.
La Encarnación llenó su historia, principio y fin, con colegas de Hipócrates de Cos. Mira por donde la casuística uno el dedo, el otro el pacto, médicos.
El tío de las yerbas no era curandero, pero curaba. En la calle ancha de Regina, Basilio se ganaba la vida vendiendo sanadores remedios vegetales. En su manta extendida podía encontrarse todo lo que necesitaban los buscadores de salud, de alivio para sus males.
Combatía las dolencias articulares con ungüentos, la pomada del tigre, la de la calle Relator, todo un mundo, guardado en redondas cajitas de madera. Farmacopea del monte. Mortero de mármol. Proclama de la maceración, del cocimiento y de la infusión, junto con las bondades del té del moro. Aula abierta de Patología, en la Encarnación.
Basilio vivía en la calle, calle de Regina, pero su vivienda la tenía en aquella que una calavera recuerda a la desgraciada Susona, en la Sevilla oculta de la judería.
No era medico, acaso fitoterapeuta, posiblemente ni existiera el titulo, pero la eficacia de su saber, alivió mucho dolor cuando la penicilina se conseguía de matute, el rotex de contrabando y el caucho preventivo era tabú.
Doctos cursos de higiene a viva voz en plena calle. La suya, rotunda y sonora, alta y clara, retumbaba en el eco de la calle con los alegatos al lagarto mucho antes de que llegaran las escamas de saquito, el tu-tu y las perlas del esse y omo.
Ese era el hombre. Secador de llagas y ulceras, eliminaba forúnculos y beatas de aljofifar y erradicaba los molestos golondrinos. Regulaba la tensión y las reglas, reducía las almorranas y abría bocas de granos ante la admiración de  los presentes.
 Discretamente, mano de santo en las venéreas purgaciones de la Alameda, ¡Ay, Alameda! Una mirada de Basilio, era como un scanner y analítica en sus ojos, le bastaba mirar a la persona, para emitir el certero diagnostico que, el consultante ante el corro de los mirones, asentía con la cabeza gacha, toda la letanía de los síntomas del padecimiento detectado, y para todos, tenía la solución, como la canción. Son las cosas de la vida.
Lo difícil es hacerlo no decirlo. Ante tantos problemas, los médicos, a veces no encuentran el remedio, no porque no lo tenga, sencillamente porque no ven al enfermo y recetan de oído. El colectivo exige disponer del tiempo suficiente para atender debidamente a cada paciente.
Fue una pena que Basilio no estudiara Medicina. Lo mismo hubiera sido alcalde, con sentido común. Cuando se marcho por los campos de heliotropos, adonde se mudó la Susona, la Encarnación podría haber sido salvada, apenas con una mirada de certero diagnostico, pero él se dedicó siempre a lo que sabía hacer ver y curar enfermos.

Sevilla a 1 de Noviembre de 2003

Francisco Rodríguez Estévez

martes, 28 de octubre de 2014

En Espada

Llegue a tiempo al lugar indicado en la octavilla,( en este caso folio)  justo donde allí en lo alto faltaron las fotovoltaicas y el alemán le puso de nombre nube, y resultó que el capricho, le llevó a tal punto de modificación que se le hizo un camino de hierro, un mirador social, con un recorrido mutilado, por seguridad, que nunca llegará a la P-6 que, aparte de destrozar la casa romana, contamina visualmente según dice la Ley de Patrimonio de Andalucía,  a la antigua fuente protegida, que se encuentra deprimida entre parterres amebas.
En lo alto de las setas estaba previsto que tuviera lugar la comidilla, pues donde podría ser si no en el gastro que significa entero, por más que suene a mondongo, ya que tal vez sea cuestión de estomago.
Ocurre que si broma es alimento, y estoma es la boca, en el entero toda broma que entre por la puerta de la estoma, ocurrirá que justo en el gastro, se va a convertir en mojón de los curativos, que otra cosa seria que  una vez entrado por la puerta, en este caso ascensor,  el conjunto entero, en lugar de convertir la broma en masita de alcantarilla,  lo mismo sale, (aparte lo que digan los distintos estomas, mas o menos agradecidos) que  aquello tenga enjundia, y sea alimento para un restablecimiento, tal que de entrada el mojón tenga su efecto.
Es más fácil encontrarse en las convocatorias espontaneas que de vez en cuando organiza la ciudadanía con algún miembro de la oposición, pues las responsabilidades tienen las agendas siempre apretadas, tal que fuera un gastro, léase entero, y colmatado dossier de asuntos de importancia de gobierno, por lo que creo que lo mismo están estudiando si van a cumplir con la Ley de Accesibilidad en la plaza municipal de abastos de la Encarnación.
Los comerciantes se reúnen para realizar una tormenta de ideas, visto que a los que deben de tenerlas  por  lo que cobran ni se le ocurre una propuesta para su estudio. Con un tiempo de espera superior al que era previsible su inicio y viendo algún que otro elemento ajeno y disturbador en la concurrencia, decido que la mejor opción es abandonar la sala y ahorrarme algún disgusto escuchando dispares opiniones que difícilmente llegarían a concretarse si pudiera ser una, solo una.
La recompensa me vino cuando tuve la oportunidad de saludar a concejales en la oposición, la oposición siempre escucha, y me prometió al igual que Zoido  tomar cafelito, un par de cosas más que interesante, su enorme preocupación por que se instale la puerta que es por todos sabida, y que interpelará  al grupo de gobierno la máxima urgencia para ello, así como conocer perfectamente cuales son las delimitaciones que corresponde a cada una de las mil partes de esta estructura arquitectónica, especialmente el área que corresponde a plaza municipal de abastos, y aquellas que tiene que compartirse con otras y cuáles son estas. No me importará lo que decidirán en el entero, ya sea mondongo, o gastro, antes nube, que se accede por la planta sótano, es de esperar que con Espada, y  compañia,  interesados en estos temas, y entendiendo que se trata de una puerta, lo mismo me llaman para el cafelito.
Sevilla a 28 de Octubre de 2014-

Francisco Rodriguez Estevez

A las claritas
Descargar WP_20141028_11_58_22_Pro.jpg (314,8 kB)A nada que las primeras luces, con la fresquita,  llevan los tibios rayos de Sol en este cálido mes de un Otoño primaveral a la umbrela de lo de la Encarnación, llegaron hasta allí, nada menos que cuatro enormes furgonetas de viajeros para formar un tapón inadmisible en la calle que se asoma el fanal de cristaleras de esta plaza de abastos municipal. Empezaron a bajarse hombres con chándal azules, y mujeres con chándal rojos, no hacia frio y el fresco hacia ver que la ropa de abrigo que portaban eran excesiva y desproporcionada con la temperatura reinante, mas viendo el peso y volumen de estos visitantes que cuando menos parecían padecer obesidad mórbida, pues no pienso que ninguno bajara de los 140 kilos.
Descargar WP_20141028_11_58_44_Pro.jpg (313,8 kB)Al parecer son los actores, pues están filmando una película en las setas, pero no parece motivo que justifique taponar una calle, y utilizar la entrada al hall de la  plaza municipal de abastos, donde se encuentran las aleatorias puertas, aquellas que por su inutilidad lo mismo dispusieron poner allí el catering  de rodaje, como si no hubiera mejores opciones para dicha instalación comedero.
Son elementos del rodaje que por experiencia personal para nada me son extraños, pero en este caso se planificaron mal pues no tuvieron en cuenta la afectacion que esto produce en la entrada a una plaza de abastos municipal donde hay vendedores y mercancias mayormenten perecederas, y una mala venta tiene sus concecuencias.
Deberían de tener suficiente autorización municipal, vía Sevilla films, para que algo tan grave se consienta, o acaso no tuvieron la suficiente, por suerte no hubo ningún incidente que hubiera necesitado los servicios de ambulancia, o bomberos, pues retirar tan cantidad de vehículos cuatro furgonetas, un camión, cuatro turismos, y dos monovolúmenes de gran cilindrada, en la dificultad de maniobras de urgencias no hubiera sido tarea fácil.
No llego la avisada policía, y todo parecía que no pasara nada, de no pasar, ni el publico y para colmo cuando intento recabar una explicación el responsable del mantenimiento de los servicios, en un acto acaso de enfado, pues no puede ser que otra manera, viene a resultar que lo que estorba ni son los coches, ni el comedor instalado en la puerta, por cierto con el tirador impregnado de una asquerosa sustancia que por desconocida podía ser altamente peligrosa si tuviera elementos contaminantes de enfermedades.
Para este asunto el joven encargado de mantenimiento de los servicios, con la responsabilidad desbordándole, mas parecía sufrir un ataque de ira hacia una figura de ternera de poliéster que hace las delicias de los niños y mugir a los abuelos, y que tengan por seguro que no tengo intención de retirar, menos viendo la cantidad de deficiencias que se tendrían subsanarse, y cuando menos cumplir con la Ley de Accesibilidad que por los visto viendo tantos detallitos, se me antoja que poca autoridad tendrá ya este responsable de los servicio, cuando se encuentra imputada la persona que telefónicamente me comunicó la pretendida autoridad que le endosaron a este encargado del mantenimiento, hoy enfadado, y que le molestó en extremo no los cohces, sino la figura de poliéster, acaso para que me subiera la tensión.
Desde las claritas del día hasta las dos de la tarde, que acabaron marchándose, evidentemente destrozaron la raquítica venta de final de mes, al punto de que en el recuento al cierre la recaudación fácilmente la superaría un gorrilla, y además en su plaza no se necesita puerta.

Sevilla a 28 de Octubre de  2014                                                                                                                     Francisco Rodríguez Estevez 

lunes, 27 de octubre de 2014

       
        Al papanatismo
Dice el diccionario que monumento puede ser  (Del lat. monumentum).1. m. Obra pública y patente, como una estatua, una inscripción o un sepulcro, puesta en memoria de una acción heroica u otra cosa singular.2. m. Construcción que posee valor artístico, arqueológico, histórico, etc.3. m. Objeto o documento de utilidad para la historia, o para la averiguación de cualquier hecho.4. m. Obra científica, artística o literaria, que se hace memorable por su mérito excepcional.5. m. Obra en que se sepulta un cadáver.6. m. Túmulo, altar que el Jueves Santo se forma en las iglesias, colocando en él, en un arca pequeña a manera de sepulcro, la segunda hostia que se consagra en la misa de aquel día, para reservarla hasta los oficios del Viernes Santo, en que se consume. 7. m. coloq. Persona de gran belleza y bien proporcionada físicamente. Lo cual viene a ratificar lo que pensaba cuando pude leer en un trabajo periodístico calificar como monumento, evidentemente que de forma errónea, a lo de la Encarnación.
Hubo otra ocasión en la que en conferencia a rebosar por el prestigio del conferenciante, este no dudó de llamar a lo de la Encarnación monumento, añadiendo al papanatismo, lo cual me hizo pensar que, la calificación en este caso me parecía correcta.
La noticia estaba en saber que existía un banco de mojones, nada que ver con estos que premia con tarjetas a sus consejeros, ni nada de banco malo, pues este banco empieza a marcar un hito, entiéndase que hito no es en este caso el mojón de la Encarnación que entonces se llevaría el premio. Es un banco que guardará los mojones de personas sanas en defecaciones consistentes y de color y textura adecuadas, para utilizarlos medicamenten introduciendo en anos de personas con unas patologías de difícil curación, que ahora basta con meter una porción de mojón, incluso por sonda gástrica serviría paro los más estrechos, y se garantiza la sanación. El lote de cinco mojones lo pagan a 50 euros la pieza, y ayudara a muchísimas personas.
Este que tan caro ha salido en la Encarnación no tiene ni por donde pueda entrar las personas, menos si buscara una salida, y todavía están las responsabilidades pensándose si la Ley es para cumplirla o saltársela a la torera, igual que  los economistas que no saben que el dinero que se recibe se tiene que declarar a hacienda, esa donde el Consejero imputado y su cuñada, por distraer como medio monumento al papanatismo, un pastón, por el contrario dispusieron que la omisión en el pago de menos de trescientos euros, como quien dice  media docena mojones, o de conejos, fuera sancionada con 4.800, que voy pagando de forma aplazada temiendo que a estos todos esto no les llegara la desproporción causada. De ahí la doctrina robaconejos.
Quería comentar que se acaba el año y ni cafecito, ni puerta, en lo de la Encarnación este tema de cumplir la Ley de Accesibilidad parece que en nada les preocupa, lo que pasa que la noticia estaba en que no se ha cerrado el número de políticos pero iban por más de cincuenta los detenidos para declarar. Así no hay manera. Todo un hito.

Sevilla a 27 de Octubre de 2014                                                    Francisco Rodríguez Estévez