Vini y vidi
Serian poco mas de las 11, y para el Ángelus todo había acabado. No era ni cosa del otro jueves, que siendo miércoles seria algo por llegar, ni cosa de “lobo”, ese que al final viene cuando nadie se lo cree, pues lo de las limpiadoras, sacando brillo a las paredes de cristal, era una señal inequívoca de su inmediata presencia.
No hubo llaves, ni eran las llaves lo más importante. No hubo ágape, acaso por que era temprano. En los pasillos amarillentos de los 39 puestos, como los 39 escalones de la película de suspense, que coinciden en numero con los de la escalinatas de la fachada Norte, la prensa grafica y la prensa local, eran notarios del suceso, un encuentro que, a falta de llaves, puso unas palabritas para afirmar que no vence el que resiste, ni el que vio crecer aquello por imposible que parecía, ni tan siquiera el que viene.
Vence la obstinación ante lo imposible, el endeudamiento ante lo costoso, el papanatismo ante lo inútil, y para que quede memoria grafica, foto que inmortalice el crucial momento, en el que se comunica que el proyecto “Metropol-Parasol” ganador del concurso de ideas para la Encarnación, premiado por un Jurado Internacional y de prestigio, expuesto en el MOMA de Nueva York, como ejemplo de arquitectura sostenible, adjudicado a la constructora-concesionaria que con los modificados, y otros estudios, eleva los costos a 123 millones de euros, de los cuales 4.4 millones de euros, (ha subido 200.000 euros) fueron destinados a cubrir la petición que para el equipamiento fue realizadas por los placeros, y con una demora pendiente de penalizaciones y responsabilidades tiene terminada la fase que nos ocupa. Como quien dice una octava parte.
Un proyecto imposible que se concluirá cuando se termine, pues una vez se inaugure el llamado mercado se acabaran las prisas. Un proyecto innovador,en el que se han experimentado nuevas técnicas de ensamblajes y pegados de madera. Un proyecto en el que la historia del pasado romano tuvo la misma firma que rubricaba el mega-aparcamiento, incluida la rampa.
Se dice que es algo tan único, que con seguridad nadie volverá a repetirlo. SSe le califica emporio de riquezas dependiendo de la gestion privada, por lo que de siempre se le tiene previsto que sea como la prolongación de la 5ª avenida neoyorquina,con implantación en la puerta del llamado mercado, tal como un cosmopolita mercadillo, de las misma primeras marcas que solo pueden encontrarse en la Galería Vittorio Emanuelle II, de Milán, lo que supondrá toda una locomotora del comercio, que devuelva la sinergia del sector que tan degradado lo encontraron, aunque mas parece que por esta actuación lo haya rematado.
Una vanguardia urbanística que cambia árboles por sombras de madera plastificada, y casi sin darse cuenta, nos inventa la azotea.
La azotea del antiguo mercado, antes inutilizada, se convierte en plaza elevada y esta en botellodromo, por más que se empeñen en negarlo. Aun queda el “antiquarium” que tiene prevista las 4000 visitas diarias, y el restauran en altura para 500 comensales, la vegetación del microclima, el planetarium de bajo consumo, y lo de las células fotovoltaicas, y lo que son las cosas, en lugar de terminarlo todo y que el mundo entero sea participe de una inauguración tal como se merece tan emblemática idea, pues acaso dejándose llevar por las peticiones de los placeros, cosa que le es, como se ha comprobado, imposible de negar, y desde la responsabilidad se ha optado por conformarse con inaugurar tan solo lo que llaman mercado, para eso vino, vio a los placeros en la plaza, y puede que abrir esto, deba, que seguro que debe, significar algo, esperemos que esta vez sea para ganar, que en este asunto, por imposible, nunca se sabe.
Sevilla a 25 de Agosto de 2010
Francisco Rodríguez
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