jueves, 30 de mayo de 2013


Una vez más

 

Mi viejo coche, pura sangre, una vez mas ha superado la terrible prueba anual a la que le conduzco dócilmente para que de forma despiadada verifiquen su calidad.

Aunque el acepta de buen grado esa tortura a la que le someten, a mi corazón se le hace muy duro soportarlo. Su motor es algo unico a sus años, rugen sus caballos como un formula uno.

Todos me aconsejan que lo deje y lo cambie por uno nuevo de esos electrónicos que te pueden dejar tirado en cualquier momento, el nunca lo hizo. Durante treinta y cuatro años me llevó a todos los sitios que dispuse, y siempre volvimos a casa.

Cierto es que no quedan repuestos ni en los desguaces, al ser un modelo especial del que se hicieron pocas unidades. Era de su gama el más económico y consumía gasolina normal.

Le llevo cada año con el corazón en un puño, pues aunque anda como una seda, tiene tantos problemas de tiquis miquis, que cuando pasa la prueba, siempre el día de San Fernando, creo que este influye.

Una vez mas los cristales bajaron a pesar que no tienen guía, y que las maquinillas no se atoraron. Una vez mas los intermitentes caprichosos se encendieron correctamente, y también el pare. La dirección controla su pequeña holgura, y las escobillas de los limpiaparabrisas, aun gastadas, se balancearon como si fueran nuevas al chorro de agua que, por esta vez, salio incluso con fuerza, superando la prueba.

El cinturón de seguridad aguanto el tiron. Los neumáticos mostraron sus dibujos, las luces, larga, corta, de posición, y los gases.

Todo correcto prueba superada, otra vez, una vez más, cuando comienza la tensa espera de conservar un año mas los pilotos, y los faros, como piezas de museo, pues sin ellos no pasaría, mi pura sangre, ni el primer obstáculo.

No se que pasará el año que viene, lo mismo aunque me duela cambio de coche. Si pudiera jubilarme, todo cambiaría. Es evidente que todas las decisiones que vaya a tomar pasan por que se coloque la puerta para la accesibilidad en lo de la Encarnación, en ella esta mi futuro inmediato, el que llevo aguardando toda la vida para que llegue y se ha encontrado que de entrada, no encuentra la puerta.

No hay comentarios: