Quien es el guapo

 

 

No me negaran que tanto las fuentes bultos tipo hemorroides, y los parterres amebas de boca de forúnculo, creación germánica de las vanguardias, diseñadas para compaginar con el icono de las setas, está siendo, tal como predijo su mentor, elementos tan queridos como que ya  han sido integrados de totalidad en el paisaje urbano del centro de nuestra ciudad, formando    parte del máximo exponente de sevillanismo.

Típico elemento esto de la “setas”, donde por si solas no llega a traer el número de visitantes anunciados en su día, ni la mitad de la mitad, pero la verdad es que suelen llegar bastantes turistas, otra cosa es que quieran entrar al laberíntico mercado, y es que no hay manera de que le pongan un acceso fácil.

Desde el enclave juvenil y de ocio, que también se le conoce por la plaza de la mayor indignación, y no solo por las movidas y los indignados, aparte de los eventos reivindicativos que toman este lugar bastante lejano de las oficinas de poder, evitando estas concentraciones, otrora en el anden del Ayuntamiento, como en la explanada de los jardines de las Cinco Llagas, o quien quita que lo procedente fuera hacerlas en la zona peatonal del Palacio de San Telmo. Escuela de mareantes ¿Pero en la Encarnación? Menudo chollo.

Que la mayoría de las fuentes bultos nunca lanzaron una gota de agua de sus surtidores, es cosa sabida, pero ahí están para delicia de los menores resbalando por su superficie, hasta que un día,  no es que salga el agua, sino que cualquier chiquillo se de un golpe en la cabeza y no encontremos la explicación salvo que los niños no se debe de dejar solo al cuidado del ángel de la guarda. Pero son las personas mayores las que mas veces meten un pie en el canalillo, por lo que las caídas se suceden, hasta que alguna alcance bastante mas que unas risas.

Posiblemente nos digan que todo esto ha sido estudiado por los técnicos, emplazamiento, diseño, funcionamiento, desagües, atascos,  luz etc. pero es aquello es de temer.

Que los parterres amebas con boca de forúnculo, le han repuesto en repetidas veces las plantas que se mueren por falta de atención y riego, y las gracias escarbadoras de las mascotas es algo evidente, lo cual no quiere decir que vayan a retirar las inútiles fuentes, y tampoco que se modifiquen cuando menos los parterres para que crezca algún naranjo, a ser posible tratado contra la tristeza.

Ahora........ no se,  me parece que sería otra misión imposible, más no creo que ningún guapo pueda modificar, ni retirar, por el momento ningún parterre, más cuando le acaban de plantar un olivo, para que nos recuerde lo que no debemos de olvidar.

Por suerte la modificación del parterre, a ser posible por otro como los lo de toda la vida no afectaría al arbolito, mas me inclino a pensar que sean las raíces de este árbol milenario, árbol simbólico, siempre transplantable, sea el que expanda el cepellón hasta que hagan derrumbarse la tabiqueria interior del inapropiado parterre. Pero ahora quien es el guapo. Cuanto no hubiera estado el arbolito más cuidado en la delantera del Parlamento de Andalucía. Un lugar políticamente correcto.

Sevilla a 12 de Marzo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez