Entrada Norte
Resultaba difícil encontrar la puerta Norte con tanta maraña de tubos, tal es que algunos preferirán, por si acaso, la puerta Oeste, creyendo que se llama así por aquello de o“este lado”, y la del lado Norte de “ennortado”, que viene a ser distraído, ya sabes.
Justo al lado del enorme cubo de hormigón en el que quedó anclada la grúa uno, en la misma intersección que por puro capricho divide la escalera asimétricamente la seta uno, en la parte de escalera pequeña, por detrás, debería de aparecer la puerta Norte, la puerta de Regina. Pero que con tanto por delante como que no se ve.
Por eso, para que se pueda acceder al interior, y aquello pueda inaugurarse, con las medidas de seguridad suficiente que no haya cristiano que se resista a negarlas, los trabajadores del andamio, en un plis, plas, como quien no hace nada, a la orden dada, ¡vamos! que los tíos han levantado una marquesina de tubos, con techo y todo, para que con el ángulo del recorrido preciso, los posibles futuros clientes, una vez inaugurado aquello, puedan entrar para realizar sus compras, lo mismo que los viandantes que quieran, para hacer una visita, y todos, cuando se encuentren en el interior amarillo, pensaran…… y tanto tiempo, tanto dinero para esto.
Acaso, esta puerta Norte, que cuesta para encontrarla, sea un dato mas en el enigma,de cómo se perdió el Norte en esto de la Encarnación, y a cambio se encontró una salida de urgencia en lugar de una puerta de entrada.Si tu me dices ven, lo dejo todo, pensando en que, si lo "viera" abierto, llegará una entrada por la salida, y mucho más que tan pancho, quedó ennortado.Cosas de las plazas, ya sabes.
A nada que entreguen las llaves, cosa que parece no llevara ningún tipo de alharaca, que será cosa, cómo mucho, de Rey, y cuando menos de Florido y de ambos si acaso, y todo lo mas, alguna foto nueva por lo menos con nueva cara, y a se posible con los mismos componentes que las anteriores.
Pues en ese punto de llaves, (que no es lo mismo que, ya ves), donde nos encontramos, tal como un amen final de todas las voces del coro, pues aparecen serias dificultades en la ocupación por el diseño de los puestos, en especial en los de frutas y hortalizas, que mas parece que aquel día en el que se llevó la propuesta, los responsables, esos supervisores que deberían de saber al menos algo de eso, y además cobran, como que a uno parece que le cogió en el “partido”, y al otro, por inactivo, en el “hogar del pensionista”, y mira por donde, reparar aquello para ponerlo a gusto de los comerciantes que tienen que hacer uso de las costosísimas instalaciones, según las cuentas 4,4 millones de euros, cabe pensar que con seguridad la desorientación va a suponer un nuevo incremento a lo que ya se lleva gastado en este lugar, que mas parece galería de alimentación que mercado, y mucho se tendrán que orientar, para no perder el Norte en esta aventura con final sabido.
Sevilla a 4 de Septiembre de 2010
Francisco Rodríguez
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