Esperando abrir, esperando Abril

A la espera

Todo se mantiene en una calma chicha en la que se deja notar los atrasos. La gente sigue preguntado cuando se llevara a cabo el traslado, con unos deseos vehementes de encontrar la novedad donde lo que cambia, si cambia todo, es solo el collar que luce y la seda que viste, para seguir igual que siempre cuando todo cambie.
Tiene lo novedoso un tiempo de efervescencia en el que, por los ejemplos que alcanzamos a ver, se pueden valorar los indicadores del posterior devenir comercial, y que tan definidos quedan en su apertura, ya que lo marcan, precisamente, los puntos álgidos inaugurales, por lo que el éxito estriba en inaugurar todos los días, para que la rutina persevere en el tiempo inicial y se haga duradera. Lo que se dice mantenerse, que es lo que mas cuesta.
Si en lo de la Encarnación la intención política, como parece, es abrir de inmediato, mal empezamos si esta apertura es la consecuencia de una equivocada programación, pues no es de recibo que en lugar de esperar al día en el que está todo terminado para poder abrir las puertas, con la evidente pompa, que por culpa de la ofuscación se pretenda y sin razonamiento, tener que abrir a toda costa, y con las consecuencias que se derivan por estas prisas, y encima, hacerlo con una sola puerta de entrada.
Pero no solo abrirá una sola puerta, la puerta este, tambien llamada de la seta tres, y por lo que cuentan el acto debe de ser en una apertura especial, (de las llamadas de urgencias), para la zona de lo que dicen mercado municipal de abastos, llamado a ser el mercado central, y considerado como el mejor del mundo, (que ya es decir) pero sin tener el apoyo de todo lo que este costosísimo elemento arquitectónico, en pura propaganda, nos han venido diciendo que atesora, y sin el cual, como todos sabemos, la degradada zona que se encontraron en este sector comercial cuando llegaron, de no haber acometido con osadía lo que ahora puede verse, como que nadie hubiera resistido la espera, y es que después de tanto esperar a esta locomotora del comercio, sinergia imprescindible, cuyo éxito radica en los inversores privados, pues ya me dirán, si no se inaugura el llamado mercado, aparte de permanecer a la espera, que se puede hacer.
Sevilla a 2 de Septiembre de 2010
Francisco Rodriguez