Los filtros




No llego a conseguir contacto alguno con los responsables de lo de la puerta, los filtros derivan mis intenciones directamente a la nada. Tendré que cambiar de móvil, de teléfono, de correo electrónico, e incluso de nombre, para logra que se me pongan, lo malo será que, si logro acceder a ellos no podré enmascarar mi personalidad.

No tengo conocimiento de que final tiene estos envíos, lo mismo van directamente a la papelera de reciclaje. Puede ser que según coja de ocupada a la responsabilidad que cabe la posibilidad de alguno llegue a leer, y hasta es posible que, en la síntesis de novedades que cada mañana reciben, quede incluida la información dando por recibido los envíos, de tal suerte, que al menos sepa que hoy también les mandé mis saludos, a modo de amplio texto, y que por serio sigue pareciendo broma.

Los filtros hacen lo que se les ordena, va en el sueldo evitar que a la responsabilidad le lleguen demasiadas peticiones, y para nada las bromas, en especial las de mal gusto. Serian en todo caso bromas amargas, pero no se como me podría tomar esta actitud de los responsables en su silencio, y que no deja de sorprender, cuando se les suponen seriedad en la responsabilidad, y muestran en el tiempo que en este asunto tiene una actuación en la que no hacen nada, dando toda la sensación de que se toma a risas, pues ya me dirán que explicación pueden dar, si es que la tienen, en el asunto de la puerta.

Los filtros siempre toman nota, y conforman con las buenas palabras, de que mantendrá a las partes informadas. No deja de ser una medida que evita situaciones que pueden ser embarazosas.

Como ha pasado mas que tiempo suficiente, imaginen como es la cosa, cuando no tengo ninguna confirmación de nada, tanto si se va a abrir la puerta, como si no, por lo que tendré prioritariamente que plantearme el conocer directamente si efectivamente los responsables están de bromas, en cuyo caso pasare a dejarme de tonterías literarias, llenas de ironía, y mostrar la seriedad que este asunto requiere, pues no es banal cumplir con las normativas de accesibilidad, ni un capricho mejorar la circulación caótica de una distribución laberíntica para un servicio publico, y cuando menos la gravedad de no disponer de una salida de emergencia para que la evacuación, llegado el caso, se pueda llevar a cabo directamente a la calle.

Tres muestras con suficiente seriedad como para que ,de una vez por todas, los responsables se tomen en serio este asunto, al que por su prioridad me hace abandonar la posibilidad de recuperar la escultura de Ceres, para que en el fanal, pueda conducir a los posibles cliente hacia el interior, y a su vez seria un atractivo mas, y mejor, que los tenderetes, flamenquitos, y castillos de aire, que junto con la indignación y las manifestaciones, no hacen si no degradar el ya de por si desolado espacio.

Solo para vuestra información, quiero que sepan que esto lo cuelgo en el blog de

“laencarnaciondesevilla.blogspot.com”, donde generalmente los repaso, pues esto lo envío tal como sale, y a veces queda confuso, pero como lo intente arreglar lo empeoro. Acto inmediato es enviarlo a mas de 350 direcciones de correo electrónico de las cuales, que sepa, al menos 10 tiene link, de hecho cuando bicheo puedo leerlo incluso en un blog de Canarias, que ni me explico si llegaran a entender lo de la puerta.

Tengo la impresión de que en breve los responsables van a tomar alguna determinación, pues, si se demoran, ellos seran los responsables, pero al parecer, tan solo habrán perdido el tiempo, en este asunto, de una manera irresponsable, y eso ya habíamos quedado que era algo que se había acabado.

Sevilla a 22 de Octubre de 2012

Francisco Rodríguez Estévez