Dichoso mes

 

Suena mejor bendito,  pero lo que cuenta es que se acaba Noviembre, y en lo de la Encarnación tienen colmatada de eventos la azotea, es tiempo de solsticio, de saturnales, y poco se parece, con tanto adelantamiento, que pueda ser tiempo de Navidad por muchas bombillas de bajo consumo que recorran del viejo puente del río a la Alameda, como la flor de la canela.

Cuando al berlines se le vino el ratón a la mano, y empezó a tontear haciendo garabatos visibles en la pantalla de su ordenador, debió de advertir que aquello, marasmo de líneas curvas, tenia, "fijarse bien" la apariencia de un grupo fungi, y cuando menos ¡zas!, se le debió de ocurrir mandarlo a Sevilla, pues el palpito le daba que aquí se aplaudiría el conjunto, presuntamente coprofilo, dado el numero de expertos.

Bendecido, como el dichoso mes, lo de la Encarnación alcanzó el total beneplácito de los actuantes que emitieron el fallo clamoroso cuando fallaron lo que fallaron, y  por algo se adjudicó a la concesionaria elegida en concurso, dado que emplearía el menor tiempo, y con el presupuesto más bajo de cuantos se presentaron a licitar. Todo hacia pensar que la adjudicación comenzaba a estar dispuestas para las modificaciones. Tiempo irreal, pero cierto.

¿Cómo hacer un proyecto imposible? ¿Cómo hacer del mayor yacimiento arqueológico, también llamado cuatro piedras un antiquarium, con todo lo que destruye una segunda cimentación? ¿Por qué se llevaron a cabo cimentaciones, para distintas cargas? ¿Cuando se encargó la madera metálica, si para acabar de pagar los tablones hizo falta el desempate de calidad?

Así cientos de preguntas que de poco servirían las respuestas correctas si las supieran. Pocos aciertos para optener segundos en el tiempo del "pasapalabras".

Con dinero para infraestructuras de barrios, con pegamento de laboratorio, y tantas modificaciones, que mas pareció algo muy distinto al garabato micológico, por lo que aquello sufre demoras que poco importaba que fueran penalizadas, según disponen en el contrato.
Luego, que si una escalera mas para alterar las alineaciones, algo contundente e inútil para que el icono sea tan moderno que ya no bastaba con aquello de la trasgresion, y en lugar de fotovoltaicas para la sostenibilidad,  de siempre fue mejor el  resultado haciendo popular un paseo de vistas, socializadas en baño de multitud, o de ballenas.
Y a todo suprimiendo puertas del espacio comercial de planta cero, refugio de los placeros, Ora pro Nobis.

Hoy se ha reinaugurado la escalera asimétrica de donde arranca la seta dos, la que modifica la alineación,  y que permanecía cerrada desde hacia tiempo, posiblemente por aquello de que en la azotea no se celebraban eventos, y lo mismo, para la mayor indignación de la plaza, apenas si arranca alguna manifestación,  y no es plan de convertir la escalera en lo que acabará siendo cuando sea tiempo de la fresquita, y llegue el calorcito. Hito, hito.

Dichoso mes, en el que vino la delegada para no querer ver una puerta inexistente, la dichosa puertecita que el Delegado, en la gobernanza, no quería aplicar manu militari para disponer que se instale. ¿Lo piíllas?

Dichoso el que promete la dicha de la puerta, ¿Pero, como? Dichoso aquel que solo espera que se la solicite, para obrar en razones. Dichosa puerta que permanece en los almacenes más profundos de las setas, donde se acumula todo el copro, que sirva de broma a los eurocariotas. Ya sabéis.

Sevilla a 30 de Noviembre de 2013

Francisco Rodríguez Estévez