jueves, 20 de junio de 2013


 
 
 
 
 
 
Inesperado

 

Hoy podía haberos comunicado otra vez mas que la trampa berlinesa, de haber contado el numero de  incautos y distraídos, seguro se hubiera batido todos los récords de personas que buscan la inexistente puerta. También hubiera dado para varias líneas, y continuación para bingo,  hacerlo acerca de la batalla versallesca, casi floral,  si en la contienda, casi parodia entre administración y concesionaria, no estuviera por medio la puerta para la travesía central.

Lo mismo venia bien para recordar lo del “retorno de Ceres”, y el interés responsable que existe en esta Encarnación, ya fuera en Patrimonio, Cultura, Mercado, Accesibilidad, Sostenibilidad, incluso medio ambiente, a como poder acatar las disposiciones ya procedan de los tribunales, o de San Petesburgo. Agüita salá.

Hubiera sido una ocasión, en la ruina de unas ventas que apenas cubren gastos, poder contar algo sobre si los papeles llegaron a Camboya, o como por inesperado, después de cincuenta años, se lleva a cabo la demolición de la ciudad del Mediterráneo, a nada que en esta se tuvo que cumplir la sentencia sobre las 370 casa construidas en la ilegalidad, consentida por los irresponsables de ayer, al igual que los de hoy, y los de mañana, que no se explica que les mueve ha hacer esas cosas.

No era el día. Con el susto de que en una de estas divergencias entre lo municipal y lo municipalizado, publico y privado, icono o tontería, proyecto o capricho,  desapareciera, por aquello de las cuentas y los números rojos,(la ayuda a los placeros aplicada por el documento verbal)  en el fuego cruzado de las partes contratantes de la primera parte y la parte segunda.
Ni por supuesto sacar a relucir lo de la cerámica trianera, que era de Toledo, para refrescar con un bioclima natural el gnomon del Poniente. Sombra, siempre sombra

El día pasaba en el aburrimiento de la rutina de todo los días, la misma tristeza generalizada salvo el bullicio de los bares, algo que han proliferado hasta en las zonas mas saturadas de bares y ruidos, prohibidos hasta hace poco.

Pero lo inesperado iba ha llegar para mi mayor sorpresa. Nada menos que vino a visitarme mi amigo Alberto. Tengo tres amigos con este nombre y los tres son tan grandes, y por eso creo que lo de Magno es por ellos.

Alberto Rodríguez, acaso no les diga nada su nombre a botepronto, pero es medalla de Andalucía, tiene tratamiento de Ilustrísimo señor, y es director de cine.  Se dice en los círculos cinematográficos, que sin duda conseguirá un oscar.

No pude hablar mucho con el porque tenia prisa, pero ha quedado en volver para contarme algo sobre su nueva película, y es que como todos son amigos se ha enterado que filmaron una hace unos días en la carnicería, y se ha tomado su interes. No tuve otra que decirle que como hicieron uso del talismán, de probados efectos, probablemente tendrá el éxito asegurado.

 Fueron unos minutos de gran alegría, y aun faltaba la noticia que no suelen dar los directores con todas sus manías.

No me pude creer la primicia que como un regalo me ofrecia, y es que la nueva película, en el guión se llama, tóquense que diría el doctor, “LA PUERTA ABIERTA” y ni me atrevo a pensar que para una localización volvamos a entrar en el laberinto.

De todas maneras creo que es un buen auspicio, eso de la puerta abierta. Hoy ha sido un gran día, a pesar de la mala venta, pues si filmaran en la plaza, alguna secuencia de la película de Alberto, seguro que entonces todos querrían pasar por la puerta para estar en la figuración.

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