Damnificados

Damnificados

 

En el fuego cruzado de las partes, adversarios necesarios en la complicidad, los damnificados, vuelven a ser los paganos, los que siempre pagan.

Las partes contratantes, entienden ambas que el negocio es malo, o cuando menos que el capricho solo sirvió para contentar lo que ha venido a demostrar, pues es harto difícil que esto satisficiera a los damnificados placeros.
 Las partes se tiran papeles y papelones a la cabeza, pero son como pétalos de juego florales, tratando de marear la perdiz de las responsabilidades, las mismas que desde la ombust-woman evita localizar tanta evidencia.

Tantos millones para una falseada modernidad, tantos modificados para empeorar lo imposible, tanto pegamento  inventado para untar tanto, tanto para tan poco, tanta vanguardia para tantos olvidos, tantas leyes para incumplir, tanta Colonia para que las coenas perciban lo que no es contable, tanto cuento, cuento tanto.

Hoy la prensa se preocupa de lo de la Encarnación, es tiempo de Tour. Serpiente multicolor que arruina la siesta, serpiente de verano de verdadera ruina. Un nuevo año y vuelve la Encarnación de damnificados placeros al candelabro de la luz y taquígrafos de los medios. Lugar imposible, donde treinta y seis columnas obstáculos impiden que los viales tengan la idoneidad regulada de una imposible diafanidad, donde el aire se vicia en su continua mezcla de olores, oler a olor, donde la reflexión de la luz hace que tras la vitrina aparezcan las carnes en los cielos, como seta saltando la  sky line, y el solomillo cuelga en la terraza lavadero.

Hoy la prensa tiene un bautizo de fuego, donde el calor delata que algo no funciona, aparte del sistema de refrigeración, donde se advierte que la Ley de Accesibilidad se incumple con impunidad. Arduo trabajo llevar a la palabra escrita tantas deficiencias. Desde la desaparición de gran parte de la hispalis romula julia, por la invasiva cimentación, pasando por las escaleras publicas acotadas al paso, la azoteas de la indignación, o la ausencia de células fotovoltaicas, pero esa punta iceberg que asoma indica que al menos les puede servir a estos entusiastas becarios,  para que propongan a la dirección realizar una serie de artículos, sobre todo lo que queríamos saber de la Encarnación y nadie nos dio una respuesta coherente, de tal suerte  que nos tenga el verano entretenido.

Ni que decir tiene que en cuanto vieron el lugar, de inmediato se dieron cuenta de la disposición aleatoria de las puertas, y por tal causa la evidencia indicaba que justo donde nos encontramos faltaba la puerta que el público trataba de encontrar inútilmente.

Sevilla a 3 de Julio de 2013

Francisco Rodríguez Estévez