sábado, 8 de septiembre de 2012

Puerta para lo de la Encarnación




Un dato para no volver a lo que ya no tiene vuelta atrás  a menos que se hiciera, como en lo privado hace la cadena  de supermercado, es decir, que  ha derribado por completo las instalaciones del mayor de ellos, y está llevando una nueva distribución y modificacion de sus puertas, visto las deficiencias que existían.

En nuestro caso de lo de la Encarnación esto no parece que pueda llevarse a cabo nada, y no solo por costo que supondría, pues están otros factores, en especial los propios de quienes, en sus luces, difícilmente pueden aceptar que se lleve a cabo cualquier mejora.

Sabemos que las puertas en lo de la Encarnación, aleatoriamente colocadas, han resultado no tener la idoneidad comercial para optimizar el circuito laberíntico de su viario interior, pero ningun estudio se hace al respecto.

Las distintas modificaciones del proyecto suprimieron algunas puertas, y por ultimo se transformó el pasillo de comunicación exterior en bar de copas, lo que nos permite pensar que lo mismo, tambien se puede abrir nuevas puertas, a ser posible con mejor y más eficaz criterio.

En este caso la respuesta, (si alguien puede explicar eso de que no se pueden colocar dos puertas) no puede encontrarse solo por el hecho de que los placeros en débil propuesta, falta de estudio y rigor, no mas lejos de un parecer, solo exigen una.

La cual solicitan para un lugar de la fachada Norte, justo en el rincon, lugar en el que muy poco ha sido demandado por EL PUBLICO, y cuya afectación al mercado, por ser una calle “ciega” en su mala distribución, poco mejoraría a este si no se coloca otra en la travesía central, lugar en el que continuamente buscan una puerta inexistente.

Aun entendiendo la infantil respuesta de que todos los placeros quisieran tener una puerta al “ladito”, también sabemos, no solo que no seria posible, pues seria un mercado sin puertas, pero en este supuesto de que pudieran “pedirlas”, en lo de la Encarnación no existe ninguna posibilidad mas que las dos reseñadas con anterioridad, por lo que no tiene sentido poner una excusa imposible, como pueda ser que la “directiva” no solicita mas de una puerta, por que si se colocaran dos, todos los placeros querrán tener la suya. Cosa, que mas me parece de niño, que de estudio serio.

Evidentemente no se trata de ir contra ningún criterio que libremente se exprese, faltaría mas, solo que se hace difícil aceptar el error, pues si no existe disconformidad mas la expresada en el argumento infantil de los placeros, y el Delegado, en su preocupación del tema quiere atenderles justamente, se hace imprescindible, la idoneidad de instalar las dos puertas, por mas que mi parecer no recoge aquella que se argumenta para poder poner, (ampliando un solo negocio) veladores en la calle, para que los fumadores puedan hacerlo en el exterior, teniendo como prioridad la puerta que niegan los placeros, a pesar de ser la que mas demanda tiene del publico, y que tiene una afectación en el mayor de números de vendedores lo que con seguridad mejoraría la circulación de los clientes.

Como esta actuación, evidentemente que no puede ser cuestión de dinero, ni tampoco es algo que se tenga que aplicar a la fuerza, en todo caso la fuerza del convencimiento, nos hace ver que solo existe posibilidad para colocar únicamente dos puertas, con lo que queda desechada todas las imposibles peticiones que puedan surgir de los placeros que no pueden ser complacidos con puertas, como parece preocupar, y aunque no es el caso que Sacyr no disponga de la cantidad necesaria para las dos puertas, ni que la Delegación haga objeción a ello, pues no se trata de eliminar la que creo menos necesaria, cuando pueden ser las dos, aunque mas convencimiento tendría que fuera un estudio técnico, de optarse por una sola puerta, como mal menor, el que decidiera el lugar correcto, de lo contrario parecería que se trata mas de caprichos de partes, que de algo serio e importante, y que comercialmente se nos hace imprescindible.

Sevilla a 9 de Septiembre de 2012

Francisco Rodríguez Estévez

No hay comentarios: