Ahora, o nunca

Ahora, o nunca

Es de una certeza meridiana que lo de la Encarnación acarreará más del doble del costo previsto. También, en los plazos de ejecución de la llamada vanguardia, la cosa tuvo su demora.
El caso es que no pudo realizarse en la fecha prevista, fecha marcada, por la sencilla razón de que era cosa imposible, (como era sabido), y ahora sabemos todos. Fecha imposible, fecha irreal, fecha de aceleración inverosímil que le valió a la constructora ganar el concurso de la concesión, por la sencilla razón de que también era algo imposible como también era sabido, y que ahora también sabemos todos., La evidencia, a nada que se mire la fecha de hoy, sirve para comprobar que bastante mas que el doble del tiempo ofertado, que no previsto se lleva transcurrido.
Pero sin que hagan falta anuncios, ni excusas, pues lo que se puede ver allí no tiene engaño, los plazos no pueden ser acortados y la cosa se retrasará, aunque llega una nueva noticia inaugural, con posibilidades de que sea la última, con previsiones sujetas a variaciones que la alejan hasta los primeros meses de 2011.
Lo de las setas de la Encarnación es algo imposible que nadie quiere asumir la paternidad, que la tiene, y asusta oír al actual responsable cuando dice, que este no es tiempo de buscar responsable, que ahora lo que hay que hacer es acabar aquello, y que las responsabilidades se pedirán cuando aquello se acabe, y las certificaciones estén liquidadas, es decir, nunca.
Sevilla a 24 de Mayo de 2010
Francisco Rodríguez Estévez