Ya lo saben, evidentemente

Predicciones

A falta de horas para que comience el tiempo esperado tanto tiempo por la callada mariana noble leal y heroica, que habiendo salido invicta una vez realizada las pruebas de bulla satisfactoriamente, toda vez pasada las urnas, y por supuesto sin reflexión previa en la jornada precedente, las predicciones, son de agua.
29-M tocado uno de tres, A-1, agua, L-2, agua. Melonares, agua. Metropol, eso, otro día, y lo de la puerta, tambien.
A falta de horas para que la bulla festiva celebre su victoria, en Tierras de Barros seguramente nadie advertirá mi ausencia.
Es esta una buena fecha para el encuentro, tantos años anhelado, por cuantos advertimos que resultaba rarito, que en el cerro de San Jorge en lugar de matar al dragón, lo alimentaron dándole rosa, como al burro, que paga con el rebuzno.
Hoy en Tierras de Barros es fiesta y SERENO, en las laderas confalones de victoria se tremolaran, para celebra que allí a nadie en la vida se le volverá a ocurrir la maldita idea de contaminar las entrañas de sus tierras, arcillas rojizas, que modelaron los manos de los hombre desde el principio de los tiempos.
Tierra fértil que la ambición, acaso del poder, pretendía en poco tiempo dejarla convertida en polvo estéril que ni para cacharros serviría.
En Los Santos de Maimona, el estandarte ha salido de esta callada mariana, para gritarle a los limpios vientos extremeños que el pueblo ha vencido al poder, con la voz y con la Justicia.
Sin olvidar los malos trances que se han pasado, muchos, en sus propias carnes.
Las predicciones hacían pensar que no se lograría, pero los vaticinios también pueden cambiarse.
En la misma hora de la fiesta extremeña, en la casa grande Pumarejo se prepara la casa, se engalana, y adorna, a la espera de que pase por su puerta el paso palio de la Virgen de la Hiniesta, vecina del barrio, que sale como cada año de paseo al centro, y que se deja acompañar por la comitiva que preside Excmo Sr. Alcalde.
Se hace tradicional entregarle una misiva teniéndola de testigo, serán otros motivos, pero tendrán el mismo sentido, el caso es que no hay otro mas que hacer llegar al poder el único mensaje de victoria, aquel que intenta una vez mas hacerle ver lo cierto, que no es otra cosa mas sencilla como, que el buen gobierno empieza por atender a los ciudadanos, y que nunca mas estos tengan que desgastarse durante doce años, como en Pumarejo, por bastardos caprichos de quien puede portar una vara de caoba cuando en la casa doce columnas, como los años, aun resisten.
En Tierras de Barros, ya lo saben, y en la Universidad.
Sevilla a 31 de marzo de 2012
Francisco Rodriguez Estevez