domingo, 29 de mayo de 2011

De A.Gonzalez a Mayer, (una plaza, y eso)


Al futuro
(Mayo micologico)

Cuando apareció el banderín de enganche de los indignados, en lo de la Encarnación estos ya formaban grupos. Cuando empezaron a llegar los indignados a la plaza, sucedió como con el “diplodocus”, la indignación ya estaba allí.
Desde el principio del principio la indignación de lo de la Encarnación tenía toda la pinta de acabar como lo ha hecho. Indignante, pero cierto.
Y es que no había mejor solución que aquel inútil icono quedara definitivamente convertido, para todo el tiempo que dure en pié, en la plaza de la mayor indignación.
Mas con ironía que indignación, (gastada hace tiempo) aparecieron los gritos de carton, en el intocable formica. Los carteles indican el camino de los retretes, segunda puerta a la izquierda, pues así reza el texto del primero para aquellos que tengan que “dar de cuerpo”, (acaso lo único que pueden dar estos inquilinos), para que los indignados puedan hacer uso de los servicios públicos en el edificio privado.
El segundo señala con una flecha, “indignados arriba”, avisando de que allí encima, en la plaza privatizada, los indignados, como si fuera “café”, han tomado a la “res” publica, siendo res estabulada. El otro, indica que la ruina está abajo.
Pero basta mirar arriba y ver los tirafondos, la machihembré, las torsiones, y los desplazamientos de las maderas, junto las grietas de micro fisuras del cemento proyectado por un lado, y abajo, los puestos cerrados en la soledad de los desérticos viales interiores, por el otro, para caer en la cuenta de la importancia de aquella que, aparte de la Hispalis desubicada, se diría que en la calle sinuosa, la ruina, acaso por los extractores de su olor, también se le presagia.
La ruina es para muchos algo indignante, por la sencilla razón de que es de las pocas cosas que le sobra a los pobres, sin embargo, en ocasiones se encuentran algunos ricos pobres, y mas fácilmente se detectan a los pobres ricos.
La indignación ha colmatado lo de la Encarnación, llenando las escalinatas que suben hasta la plaza de la mayor indignación donde aun pernoctan, junto con la indigencia, los radicales. Abajo el cartel de indignación es informativo, “Efectivamente, aquí, falta una puerta”. Puerta al futuro.
Sevilla a 29 de Mayo de 2011
De plaza de España, a la de la mayor indignación, en marcha
Francisco Rodriguez

No hay comentarios: