La unión
Al igual que a, puede ser des, como cuestión gramatical, pues no se trata de una exacta ecuación, si no de que determina el significado de sin. Vamos a aclararnos con unos ejemplos. Desunión: sin unión. Apátrida: sin patria. Despropósito: sin propuesta razonada. Ateo: sin Dios.
Viene al caso pues existen quienes tienen el convencimiento de que es normal, y por lo tanto no hay nada anormal, en las relaciones, actitudes que se toman, se hacen en, dentro, del ayuntamiento.
Otros, por el contrario, normal o anormal, con normas o sin ellas, lo consideran que algunas cosas son una”güarrerida”, pero sí pueden aceptarlas cuando la unión que sea, quede plasmada en contrato o bendición, (que la palabra se la lleva el viento) y lo que salga del vinculo tenga nombre y apellidos, por si acaso.
Acertado o desacertado, es poca la diferencia, siendo tanta, que no todo puede valer, y poco importa que esté sellado y rubricado de formalismo, dándosele carta de normalidad. Ni tampoco lo anormal, lo paranormal, que pueda aparecer, tienen que ser acatado y aceptado con naturalidad.
Tal como a y des pueden significar sin, y ana, hijo de, para, tambien establece lo que se encuentra al lado de. Es una suerte que “para” la mujer, sea el hombre, y viceversa, y en estos tiempos, estén admitidas con normalidad otras uniones anormales, es decir, sin esta norma.
El caso es que, el que está al lado de la novia, resulta que no es el padrino. Lo mismo que la tarjeta que anuncia el enlace, no es el sablazo. Viene de cultura antigua que padrino e invitación, tengan el mismo nombre con el que se ahora se utiliza para el salon de actos académicos, paraninfo.
Otra cosa es “parafisis”, que no es que uno este junto (para) un aficionado (hafiz), la cosa es peor, dice mi diccionario que se trata de “cada una de las hifas estériles que se alinean al lado de los ascos, o basidios, para construir el himenio en empalizada” ¿La Encarnación?
Si hubieran sido ninfas, paraninfas, que no son paraninfos, pues estos son cosas de los tunos, con boda y ayuntamiento, lo más probable es que le correspondiera sátiros. Si la empalizada del himenio, o de los cojones, fuera parasol, como lo de la Encarnación, al lado estarían las sombras, como la que se podría disfrutar en el Prado antes de que con tanta copula se pregonara lo del “climax” como anuncio de preservativo. Lo que no pueda el amor, lo consigue ana.
Sevilla a 17 de Octubre de 2008- Francisco Rodríguez Estévez
PD. Si bien no he podido encontrar en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española que tengo incorporado en el ordenador, las palabras PARAFISIS e HIMENIO, juro que estas se encuentran en mi viejo diccionario enciclopédico Salvat.
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