La trampa
Por mas que se trate de descubrir la intención de esta
trampa, no parece posible entender que puede llevar a quien, en la
responsabilidad, llega a realizar actuaciones a las que difícilmente se les
puede encontrar el sentido.
En la trampa al efecto, aparte de convertir en desierto toda
la zona del segundo mejor cahiz de la tierra de mi callada mariana, solo aparece, a menos que me
saquen del error (en algo que todos los días mi vista contempla) que tales
acciones tiene como fin medidas recaudatorias, pues la trampa para cazar automovilistas,
es tan eficaz, que cada día llena las arcas con las aportaciones involuntarias
de cuantos caen en ella.
La trampa está servida, lista para picar al igual que el
veneno de la reclusa parda, basta ver como su picadura necrosa la piel
sensible, y sus terribles efectos, que en ocasiones tiene que cortarse de raíz,
por la consabida perdida de sustancia.
No es fácil aguantar dos picaduras de 200 euros, y dos
puntos, por lo que el sentido común aconseja abandonar ese cahiz de la Encarnación , el
segundo mejor de esta invicta tierra de puerta y puerto, mercado, plaza y
aeropuerto, destrozado de modernidad, y
cada vez más solitario.
Bajo la fronda del naranjo, a los pies de la torre almohade,
una placa de tráfico de dificultosa visualización
indica que queda prohibido el paso de toda clase de vehículos, con sus excepciones.
Una vez se ha transgredido el prohibido paso, como las setas
las leyes, las normas y los reglamentos, las opciones son dos, o coger la calle
primera a la derecha, encontrando al final la fila de bolardos que imposibilita
la circulación, y la circunvalación del perímetro micologico para no poder llegar
al punto de la entrada imposible, o optar por la segunda calle, y no advertir,
que este paso solo le está permitido a los propietarios de aparcamientos,
evidenciando una vez mas que esto de las igualdad no lo es para pasar por las
setas. En la mayor parte, las victimas propiciatorias
son del transporte de mercancías. ¡Que dolor!
La venenosas setas acabaran siendo mortales para los
negocios, una vez que saturada la zona de bares, brecitos, baretos,
gastrobares, bar de copas, y franquicias, ya sea por abajo, e incluso en la
plaza botellodromo, para el agrupamiento y avituallamiento del inicio de manifestaciones, pues todo el mundo,
exceptuando los responsables en este bicéfalo capricho, saben perfectamente que
el éxito comercial de los espacios multiuso está en facilitar la llegada del
publico, bien con transporte publico, metro imposible, metro-centro de mentirijillas,
parada de autobuses, así como los taxis y todo ello sin evitar, a toda costa,
el uso del coche privado, y como comprenderán no le voy a facilitar la solución,
que la tiene, pues solo hace falta mirar durante varios días la misma panorámica
que contemplo, y caer en ella, por cuanto seguir picando como la reclusa parda,
con 200 euros y dos puntos acabaremos quedándonos solo.
Si lo de la puerta siendo tan fácil, lleva para cuatro años ¿Cuánto
tiempo se le puede calcular que tardaran en encontrar la solución?
Mi amigo Miguel, que siempre me dice que estos partías, no
son mis amigos, que se pasan el asunto, como lo del cafecito, que estos no darán
en la vida con la respuesta. De ser así lo mismo cuando estemos mas tranquilo
en el despacho de la alcaldía tomando el cafecito se lo cuento, pero antes lo
de la puerta. Para que no haya trampa.
Sevilla a 11 de Julio de 2014
Francisco Rodríguez Estévez
No hay comentarios:
Publicar un comentario