viernes, 30 de noviembre de 2012

Regeneración

Aunque los teóricos afirman que las situaciones no tiene por que repetirse,
 y  puede que sea cierto, ocurre que en demasiadas ocasiones la semejanza hace parecer que todo puede volver a suceder, tal como fueran en otro tiempo.
Al comprobar en estos que cada día la situación se nos hace mas difícil  es fácil preguntarse si no será necesario regenerar el sistema, cosa que evidentemente no es nada nuevo, pues la vida es una continua regeneración de células, que suplen a las que agotaron su ciclo.
El movimiento regeneracionista irrumpe en la sociedad civil cuando los poderes encargados de la gestión,  aparte de no servir para nada en los momentos de dificultad, pues resulta que caen en la cuenta  que son algo a eliminar, al menos por aquello de que les cuesta un dineral mantener políticos ineptos  y militares en exceso, y acaso, tomado a eliminar todo que aparece putrefacto, se necesita encontrar un cirujano de hierro para extirpar esas células podridas en el organismo de una nación cada vez mas enferma.
No todas la regeneraciones que se han dado, aun llamándose de otra forma que esta  que lo toma en el siglo XIX,  han tenido resultados positivos, ni el regeneracionismo es la única solución si tenemos que reinventarnos esta ciudad, en este tiempo de paro y deudas, que encaminan a una pobreza que se hace inminente para muchas personas, y de cuya situación  según los analíticos de las economías regenerarla no es cosa de corto plazo.
Evidentemente mientras escuchaba las doctas voces de cinco grandes, cinco, la cabeza se me distraía en el recuerdo del doctor que lapidó tanto dinero publico para, según su opinión,  regenerar un espacio degradado en el tiempo, por el que muchos pasaron y nadie le metió mano (sic) hasta que llegó el.
Naturalmente en cada frase me llegaba el recuerdo de lo que la irresponsabilidad llego a realizar en lo de la Encarnación  basándose el un cumulo de mentiras, y soslayando, evitando e incluso transgrediendo normas, reglamentos y leyes. En el pensamiento afloraban las cuentas del encaje de bolillo financiero junto a los cuentos de Calleja de la sostenibilidad , de la vanguardia, y el modernismo. Un regenerador espacio que seria la sinergia del comercio , un emporio de riquezas, un hito, (aquí puede leer mojón) donde el tejido mercantil saneado, estará focalizado en un mercado emblemático  donde los "pobrecitos" placeros disfrutaran  de un merecido lugar de trabajo después de soportar por cuarenta años una provisionalidad que se origina en los tiempos del dictador.
Evidentemente este regeneracionismo llevado a cabo por el medico metido a político  no era para nada las medidas que hubiera llevado a cabo el cirujano de hierro, cortando los grifos de los caudales públicos  mas mal, este  doctor visto los resultados hizo todo lo contrario, cosa que se veía  en cuanto se propuso que para las arcas publicas, que están para vaciarlas, no existe nada imposible, mas madera. El movimiento regeneracionista, versión reinventando Sevilla, no dejara de ser un intento, otro mas, para comprobar que tan conformes son sus silenciosos habitantes.
En el debate, crece el interés  pues para que el regenaracionismo comience se hace necesario conocer el problema, es como lo de la puerta de la Encarnacion,  como todo en la vida, luego hace falta querer solucionarlo, y finalmente llevarlo a acabo para que pueda generar un nuevo camino, una nueva entrada, una nueva salida al futuro. Lo que les digo siempre, hace falta una puerta.
Sevilla a 30 de Noviembre de 2012
Francisco Rodriguez Estevez