Lo que no puede ser
Se decía de Granada, pero es en Sevilla, donde, después de lo de la Encarnación, todo es posible.
Viene al pelo que, una marca que “hace” las prendas deportivas en oriente para venderlas en todo occidente se sacó aquello de “nada es imposible”, pero intencionalmente suprimió la segunda parte de la frase, “a menos, que no pueda ser”. Pero preferimos, como referencia al caso que nos ocupa, la máxima taurina de “lo que no puede ser, no puede ser. Y además es imposible”
Podría seguir en inútil esfuerzo intentando hacer lo imposible, cuando ya no puede ser, pues en nada cambiaría eso,(por raro que parezca, consentido), que hicieron todo y mas que lo posible, para que le apareciera a la Encarnación.
Viendo aquello no se sabe ciertamente si ha sido imposible cambiarlo, y menos, si es posible que incluso sea insostenible, si se duda de su sostenibilidad. Cuando menos se observa que lo de las fotovoltaicas, como que no puede ser, ni hacen lo posible, sencillamente por que los que hacenloimposible@veteasaber, como no puede ser (de otro modo), les es imposible….. sostenerlas.
Viene a ser tan imposible como si la setauno, una vez que se ha saltado la barrera citara en los medios de la plaza, que antes fuera de toros, para dar explicaciones de la cobertura metalica y las imprimaciones xilófagas, al igual que la setaseis, que quebrantando todo principio de la historia, arranca, nada mas y nada menos que en el propio salon comedor de una villa de la colonia, encima, como laminado de pino, contamina la vieja fuente, por suerte, sin causar victimas que no hay bacteria que se instale con el desagradable olor a zotal que emanan las micologicas.
Insostenible e imposible, asi es la cosa por insufrible. Pero cierto es, que lo que es, es lo que es, (Perogrullo) y lo de la Encarnacion es, que nadie acierta a saber que es lo que tiene que sostener, para ser sostenible.
Por mas que hacemosloposible@arrobayarrobaotravez, aun se ignora y es lo que no puede ser, que son las celulas fotovoltaicas, esa cosa para la energía en los edificios sostenibles, como lo de la Encarnación. Pero ni caso.
Sevilla a 5 de Octubre de 2009
Francisco Rodríguez Estévez
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