Tanto por hacer
De la primera vez que escribí una carta al director de un
periódico para hacer referencia a lo que acontecía en lo de la Encarnacion que
por entonces llevaba siete años en la provisionalidad, ni me podía imaginar que
después de cuarenta años aun estuviera escribiendo sobre este tema que ya
cansa, pero escribo.
Ya en aquella fecha los placeros estaban más que divididos,
perdidos, desde el 66 en cuanto se eliminaron activos de lo que generaba por su número
una gran fuerza, mas debilitados por cuanto siete años más tarde serían ellos
mismos los que realizaron los llamados mercados provisionales, tales
edificaciones presuntamente levantadas para ser efímeras, con una previsión no superior
a los tres años, y de las que aun
tenemos el vestigio de una provisionalidad que queda en pié.
Sería pues una construcción
del periodo tardo-franquista y lo mismo tiene categoría alcanzada como para que
se conserven en el tiempo, tal como calabozos de la Gavidia.
En la dispersión de los vendedores de la antigua plaza de
abastos de la Encarnacion, en el tiempo convertido en solar expropiado, estos
se emplazaron por toda la ciudad, pero todavía quedaron algunos más, como
congelados en el tiempo, placeros que no dispusieron de una alentadora
provisionalidad de chapas y asbestos, y otros tantos disconformes con actuación
llevada a cabo en connivencia con la propia administración que les arrebataba
sus derechos. Con ello empezó la despiadada automutilación del colectivo frente
a las minorías, y el tiempo hizo el
resto, cuarenta años son demasiado para todo incluso para escribir.
De esa historia tan sabida como olvidada, historia de chapa,
la de los 93 del 73, a los 33 del 10, se deduce un jivarismo reductor en el
cuerpo social que se auto mutila resistiendo para alcanzar lo desconocido……… el
fanal, donde convertidos en
subarrendatarios van sucumbiendo en números y en la propia debilidad laxa desee
el principio del fin, y puede que sea que, como especie a extinguir, los pasos
lleven al camino.
Cansa, pero escribo, tener que recordar, tal que la memoria
no existiera, y todo porque aquello todavía funciona, evidentemente solo por el
esfuerzo de los placeros, los subarrendatarios de la plaza municipal de abastos,
los del acristalado fanal, solo por ellos, aquello perdura mal que bien, y es
que no se podía hacer peor, ni en materiales, ni equipamiento, 44 millones de
euros a tal fin se dice que fueron destinados, ni diseño, ni estructura
comercial, ni optimización de un recorrido nunca estudiado, ya que ni siquiera
echaron un vistazo al reglamento municipal.
Decir más veces, no importa, pero es que las pesadas puertas de hojas
dobles, de las que solo abre una, está fuera de la propia Ley de Accesibilidad,
insistir en la falta de renovación de aires en
un sistema de climatización obsoleto, recordar los negativos efectos de
granito, y cuya superficie oscura revela la negatividad de su elección.
Mil
veces más las deficiencias se advierten a la vista. Viario lleno de enormes
columnas por lo que crean muchas desigualdades en la ubicación de los
vendedores que quedan fuera del recorrido al que obliga una malísima ubicación de
las puertas.- ¿Donde estaRÍAN la gente responsable?, lo que cobraban por estar aL LORO.
tAL QUE El “emporio de riquezas” “la sinergia del sector” “la
locomotora del comercio” y “la prolongación de la 5ª avenida neoyorkina” “el emblemático
mercado”, no dejaron de SER frases GRANDILOCUENTES Y TAL FALSAS de los responsables políticos del momento, y que
los palmeros aplaudieron EFUSIVAMENTE, ALGUNOS CON LAGRIMAS EN LOS OJOS.
La realidad es otra, y en diez años, diez, ni una
medida paliativa, ninguna mejora, ninguna reparación. Las puertas siguen siendo
las mismas y la renovación de aire sigue inexistente. Dos cositas para empezar,
y tanto por hacer……………y cada día menos tiempo.
Sevilla a 12 de Junio de 2020
Francisco Rodriguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario