Seis años

Se cumplen seis años, que no son pocos, de la polietapica inauguración de lo de las setas. Es todo el tiempo pasado en lo de la Encarnación metropol-parasol sin estacion de "metro, ni metro-centro, por no remontarlos hasta los dieciséis en los que comenzó con el siglo el de Monteiserin, de los cuales los iniciales doce fueron los que le tomó al doctor Sanchez en llevar a cabo lo de la Encarnación, que se adjudicó en el quinto año en la segunda gobernanza, esta vez con el pacto de progreso, (Yo Alameda, tu Encarnacion) y es que en todos estos años transcurridos desde la inauguración de lo que fue un proyecto imposible, triplicando el presupuesto, con tres años de demora y sin penalizaciones exigidas,  por más que pasaron seis años y tres Alcaldes, pues que puede extrañar nada, como que aun estamos en el flagrante incumplimiento de leyes, normas y reglamento, en algunos casos irreversiblemente..

Tres consistorios, y como si tal cosa en cuanto a la exigencia de cumplir con lo dispuesto, y  no solo con su propio reglamento municipal en vigor, que ya esto hace contar el amplio número de personas que con responsabilidad, y emolumentos oficiales, no estuvieron a la altura por cuanto se escaparon demasiadas, y en especial, pondríamos el asunto de la aleatoria colocación de las puertas de la laberíntica plaza municipal de abastos, puertas que a saber porque razonamineto quedaron situadas, con toda seguridad, en los peores lugares de la sinuosa calle cubierta, acaso con la idea de hacer de aquello un laberinto anti-comercial y a fe que lo han logrado.

Seis años, seis,  y tenemos indicio, solo indicios, de que existe  preocupación por parte de los demás grupos que conforma el actual consistorio, pues queda demostrada la debilidad de la palabra en periodo electoral del candidato, hoy electo, y todo parece que ahora se pueda proceder a la colocación de cuando menos una puerta automática, cuya ubicación, al parecer queda en estudio, lo cual deja la seguridad de que esta estará colocada en la travesía central, pues siendo esta  la calle con mayor numero de vendedores, resulta ser la única que no dispone de puerta, mas aun cuando su colocación dejaría clara evidencia de que puede ser utilizada llegado el caso como salida de emergencia.

Sin duda no estaría de más que en el estudio, a ser posible por un técnico en recorridos comerciales, lleve a una mejor distribución de las puertas existentes, por cuanto de las cuatros dos quedan inutilizadas, y las otras dos solo abren una de las dos pesadas hojas creando una verdadera paradoja de entrada.

Sevilla a 10 de Diciembre de 2016

Francisco Rodríguez Estévez