Cambios

Los años hacen que cambien las personas, los tiempos e incluso las costumbres. Se pasa  del nacimiento al arbolito, y de la provisionalidad a la vanguardia, en un plis y de 36 millones a ciento cuarenta,en un plas. De ser ejemplo a estar mputado, procesado y condenado. El tiempo pone a cada quien en su sitio aunque siempre hay quien se escapa de la merecida sombra. Todo puede ocurrir en un plis plas, y así entre plis plases la vida va cambiando, como cambian los colores.  

 Sin embargo, en cinco años que lleva la plaza municipal de abastos de la Encarnación, disfrazada de laberinto, aun no se ha encontrado la manera de cumplir la Ley de Accesibilidad para instalar una puerta automática.
Hoy que puede comprobarse que las excusas del diseño se caen por su propio peso como puerta de “Antiquarium”, cuando se comprueba que la calle publica con vistas al imperio se hace bar de copas, y que en la sinuosa calle cubierta se llevan a cabo modificaciones sustanciales, con la colocación de varias puertas más acorde con el nuevo negocio que por fin completará en sus usos esa que fue vaticinada en otro tiempo como la prolongación de la 5ª Avenida de Nueva York, donde anunciaron que los mejores comercios se implantarían para crear la sinergia de un emporio de riquezas, y que junto con la locomotora de la plaza municipal de abastos, esta seria referencia mundial bajo el marco del epatante diseño transgresor de Metropol. Sin estación de metro, ni intercambiador modal con parada de metrocentro. Cosas del cambio.

Lo que son las cosas, aparte de que la plaza municipal de abastos no tenga la puerta automática, que el comercio tradicional del sector haya desaparecido, y que en este tiempo ni tan siquiera se haya buscado la responsabilidad en los disparatados costos de semejante actuación, que se puede pensar de los que nos traen bares de copas y cafeterías, al parecer también un karaoque, en la zona de influencia de la dresina, que así quedó  tanta locomotora. Zorra de raíles, zorra idea.
Cosas del cambio al pasar de zona saturada de bares y ruidos cuando existían media docena a la actual permisiva que autoriza bares para todos.Por lo tanto allí se pueden contar hasta treinta de estos establecimientos, sin incluir los que se lleguen a reabrir en la nube, que así gustaba decir al berlinés al mirador, que por cierto allí no solo la Ley de accesibilidad se soslaya si tienes que buscar los servicios.

En este tiempo que las urnas nos han deparado, y con las distintas opciones que libremente ha elegidos el pueblo soberano, es de suponer que estas no tienen otra que llegar a entenderse, pero se puede pensar que las cuatro opciones que andan merodeando el cotarro del poder, tienen demasiados argumentos del pasado más reciente como para no creerles nada de lo dicen.

Lo peor es que disponen de tres meses para pensar, si se repiten las elecciones, y ya me gustaría que si así sucediera, para que no ocurra como con lo de la Encarnación, y que explicaran como piensan llevar a cabo cada una de las propuestas que hagan alegremente, y como se financiaran, de esta forma al memos no quedaran puertas que instalar, ni mucho menos giratorias.
Los grupos políticos municipales que en esta ocasión no hicieron campaña en la Encarnación aparecerían, por  lo cual con el cambio de actitud, tendrían motivos en Marzo, cuando los idus, cuando acaba la Encarnacion que ha llegado con los resultados, si colocando la puerta les es más fácil la visita. ¡Que Cruz!

Sevilla a 25 de Diciembre de 2015 (día de Navidad)

Francisco Rodríguez Estévez