Transgredir
No bastaba que aquello fuera una ocurrencia, que ya era tontería llegar a decir que con eso la
ciudad volvería a estar en el mapa. ¡Qué cosas! Sería que pensaban que sería por decir frases para
recordarles en el futuro, ahí tenemos la famosa trilogía del doctor Sanchez junto “con la ciudad de las personas” y “la
construcción de un sueño”, lo cual hay que recordar que tuvo
para mayor admiración de los palmeros la
aparición de la famosa perla de que lo
importante era que aquello "fuera un proyecto transgresor", tal como así fuera realizado,
luego vendría lo del pegamento y después lo de “más madera”, que se continuaría
con “ después de treinta siete años una
demora de varios meses no tendría importancia”, por cuanto fue malo lo ocurrido que
fuera más de tres años.
De todas, la palma se la lleva junto a la expresada por el
doctor acerca “del mimo con los pobrecitos placeros” aquello de que “no se
podía hacer otras cosa” y donde me dejo lo del “proyecto transgresor en esta
anquilosada ciudad”, lo dicho, en esta
compilación daría para un libro de fraseología de la Encarnacion.
Podríamos seguir, no seis años, si no seiscientas veces
seis, pero que decir ante tanta dejación, y tanto interés en transgredir si la razón
no lo soluciona, más sabemos que será algo que tenga que hacer el tiempo, algo
tan valiosos del que ya no dispongo en la cantidad suficiente. Cuando se
inaugure la puerta automática, me llevará el recuerdo a tanta ineptitud año por
año, releyendo el blog, pues es historia que parece increíble, “La historia de
una puerta”.
Sevilla a 9 de Octubre de 2016
Francisco Rodríguez Estévez
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