Tan solo una sombra

Sin actividad, ni declaraciones, ni ocurrencias, el encefalograma plano de la zombi espera, siendo una sombra, que se le pase los efectos del pinchazo del pez globo, para volver a la normalidad. Durante años, víctima del vudú, la mujer haitiana murió cuando la medicina logró sacarla del trance.

 Igual que el envenenado mortal delira en el obligado reposo, el concurso de ideas para lo de la Encarnación, en tal estado de narcosis demuestra que nada preocupa a nadie su previsible final, ni  llena de incertidumbre la quietud del  inquietante silencio.
 Después de lo montado en la carpa metalica, no hay declaraciones, ni intenciones, ni noticias de prensa, ni nada de nada, cien días de abstinencia.
 Reflexión del tres. Diciembre, Enero, Febrero  Cinco para la despedida, Marzo y Abril, sufragios en Mayo, tres de margen llegan a Julio, uno de vacaciones, dos de negociaciones Octubre y Noviembre y el último dentro del plazo concursal. Lo mismo empieza el cuatro del tercer milenio .

Año perdido, año de olvido. Año pasado, año ganado. La pequeña Julia encontró vivienda de lujo, cuando le estaban tramitando el desahucio de su ruinas. Año tirado, año acabado.

 La galería-sótano puso rumbo a la Isabela y se fue con Isabel una vez acabada la excedencia.

Por el momento no crece, todo esta en estudiar lo imposible,  pero crecerá en emblemático cin-cuenta, sin cuenta pero se la tendrán que echar, cuenta aparte, para que no se quede el simbolico metalico del diseño en un pin de colección. Principalmente, por que los contenidos en los edificios, primera lección de arquitectura, es tan importante como el pretendido vanguardismo, llamese ocurrencia.

Como cabe esperar la idea llevará firma de prestigio lo que le puede hacer ganar puntos, en detrimento de los pocos que pueden sumar los cincuenta placeros pinchados por los cuentos del mortal Nemo, por lo que perderían los de casa. ¡Cianto se aplaude lo de afuera!, Se dice que esta contienda debe de lograrse pero es evidente que nos ganan los de fuera. Poca resistencia para tener ambiciones como para medirse con otras ciudades que se dicen de referencia en mercados públicos, aquí llamados plazas de abastos, tales como los de  Moscú, Estambul, Venecia, Sofía, Atenas, Marsella, Barcelona, Valencia, San Sebastián, Pontevedra, e incluso Triana lugares en los que sus plazas de abastos, duplican, triplican y quintuplican en contenido la previsión de cincuenta unidades para el llamado Emblemático en lo de la Encarnación.

Si barbaridad era lo del mercado-cueva, esto del  emblemático de cincuenta placeros es de una ridiculez pasmosa. El zombi no piensa, ni siente, ni padece, la narcosis se apoderó de su razón. http://notinerd.com/videoalguna-vez-viste-a-un-pez-globo-inflarse/
Pinchado el globo, el esmirriado mercadito, no será tal, si acaso la sombra de una pretensión emblemática, un capricho.

Sevilla a 2 de Noviembre de 2003

Francisco Rodríguez Estévez