viernes, 30 de mayo de 2014


 
Una vez más

 

Coincidiendo con la festividad del patrono Rey Fernando, conquistador y santo, un año mas mi coche, mi viejo coche, se ha portado como un campeón superando el maltrato que sufre cada vez que le llevo a la inspección técnica, que mas parece que me lo quieran descuajaringar, pues en los treinta y cuatro años que llevamos juntos nunca se me hubiera ocurrido darle esos jalones para ponerle  a prueba, dura prueba, que una vez mas ha superado.

Es cierto que en los primeros veinticinco años acaso por su calidad, y es que cuando un coche sale bueno, apenas si tuvo pequeñas reparaciones, y  en estos nueve últimos solo le dedico lo mínimo en atención, por lo que aun tiene mayor merito. Posiblemente por esto creo que debo de indultarlo y por mucho que me ofrezcan en los planes para cambiarlo no resistiría dejar de montar en este fiel compañero de viajes.

Treinta y cuatro años, que se han pasado volando, y en la provisionalidad  fueron treinta y ocho, ahora es cuando cobra sentido aquello de que veinte años no es nada.

En el laberinto de lo de la Encarnación, parece que fue ayer, cuando acordonada por la policía, local y nacional, y cercada por las fuerzas civiles en protesta por el despilfarro llevado a cabo, no tuvo otra el doctor, visto el panorama, que pasar a paso de mudá, entrando por la puerta falsa, de una fachada de decorado, y salir por los bajos, casi de espantada, en coche de luna tintada.

Pues de toda esta efeméride pasada la Esperanza, hace mas de tres años, los mismos que el nuevo Alcalde ha tenido para venir a esto de lo de la Encarnación que llaman plaza municipal de abastos, en una sola ocasión,  mas que suficiente para in situ verificar lo de la puerta.

Si cuando era candidato, “lo de la puerta tenemos que verlo”, y si en el primer año “¿pero, como?, en el segundo fue “SI, pero no,” para mi mayor sorpresa, en este, la situación era, después de “encontrarse en vía de solución”, de tensa espera y  poco mas me podría  confortar que de su palabra brotara la invitación para “la próxima semana, te llamo y mas tranquilo, en mi despacho tomando un cafelito, y lo tratamos”.

Cierto es que  ha pasado el tiempo, volando, y otras cosas, pues entre la Feria, los actos del partido, y el triunfo del Sevilla, las votaciones, junto a los actos de la Esperanza, no creo que la apretada agenda le haya dejado un resquicio para tratar algo que para mi es de la mayor importancia.

Ahora, que si la carreterita para el centro comercial, lo del puente para el gnomon que marca las horas del ocaso, el delfinario, y la preparación de la campaña de la precampaña, (que es cuando cabe que entre lo de la puerta) pues una vez mas lo del puente, como que no es cosa de irse en este con el partido de la Selección, la cruz de Mayo de Pumarejo, y la Velá de Retiro Obrero, y como por el de la Encarnación no se puede pasar para contemplar la vista socializada al completo, y por mas que se tenga que construir uno como premio a la estupidez de una empresa bancaria, lo evidente es que como no instalen la puerta pronto, esto tiene ya mu mala carita.  Como diría Vicedo y Salustio, “Buenas tardes, Señor Alcalde”, mi café que sea descafeinado de maquina. ¡Ya le cuento!

Sevilla a 30 de Mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

 

martes, 27 de mayo de 2014


La sombrilla china

 

Serian las cinco de la tarde, en el preciso momento que me encontraba desesperanzado delante de un micrófono para hablar de lo de la Encarnación, mas pensando que por entonces la Esperanza habría alcanzado la Feria.

Después de mucho tiempo diciendo el mismo discurso este tenia  ya poca improvisación, acaso una anécdota de ultima hora, pues se trataba de repetir lo que tantas veces había expresado, de que era la Encarnación, que fue, y especialmente en que ha quedado convertida.

No era fácil tratar de explicar las situaciones en cada momento de esta lamentable historia, ni tampoco pretendía encontrar ni respuestas, ni descubrir a los responsables, la cosa está hecha, mal que nos pese, aun teniendo una sentencia del Tribunal Supremo de Andalucía que viene a decir, sin entrar en el incumplimiento de leyes, normas, y reglamentos, soslayadas intencionadamente, pues nada menos que en su construcción, que mas se diría “pegada”, no se hicieron las cosas correctamente, y por consiguiente anula artículos que hace de esta, con mas que sobradas razones, candidata a desparecer. Tala de setas.

El caso es que no me salió el discurso esperado, pues este además de torpe surgió atropellado, por la gran cantidad de datos que sin hilazon iba desgranando, y mezclando comentarios inacabados con las imágenes que el proyector sin pausa, hacia visualizar en una gran pantalla. Esperemos que en la próxima ocasión.

Esta vez quería dejar lo de la puerta, pues como sabéis estoy a la espera de la llamada del la máxima responsabilidad para tomando un cafecito en el despacho oficial saber de una vez si de verdad les interesa esto de la Encarnación, y ponen la puerta o lo mismo me veo obligado a abandonar si tuviera la negación por respuesta, pues así cantara el gallo, no merecería la pena para nada el seguir.

Mi intención era comentaros la anécdota de aquel que cuando apareció, no sin cierto estiramiento, de quien te ha visto y quien te ve, que dejó evidencia de que era lobo errado, pues cual acémila llegó a aseverar que la sombrilla china estaba estorbando al cable aéreo, y no lo contrario, por lo que por un momento hasta hizo temer al representante vecinal que en su desfachatez y desde su autoridad ordenase la tala del joven arbolito que sombreaba un pequeñísimo parque infantil, logrado no sin esfuerzo.

Por suerte no son siempre así estas personas las que toman decisiones, este en concreto que fuera adalid de la ciudadanía, cambió su liderazgo por una hebilla roja con bordados en oro, ni que decir que tuvo en el sueldo que hacerse la foto con la maqueta premiada de lo de la Encarnación, acaso como experto en tala, junto al esotérico delfín, animales al fin y al cabo.

Sevilla a 27 de mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

lunes, 26 de mayo de 2014


La amorfophalum

 

Ni hace falta ser experto en aromas de los llamados nauseabundos, termino que nunca he aplicado por mas que se deja sentir  los que desprende lo de la Encarnación, mas cuando en su interior existen demasiados elementos que a nada propiciarían superar todo lo que larga, según dicen de la amorfophalum titán,  en plena floración.

Si es difícil superar a la papa putrefacta, en el ranking de la cacosmia enfermiza, los fétidos efluvios del bicho muerto, solo encuentra parangón en la descomposición de la fauna marina, si mal, tanto el escape de las judía pintas, como el huevo cocido no le van a la zaga.

En lo de la Encarnación, por mas que tratan de evitar lo que larga aquello, hay días como el de hoy que vuelve a los insoportables primeros tiempos, y el bofetón, a nada entrar por unas de las hojas de las puertas dobles dispuestas aleatoriamente, lo que pide el cuerpo es de momento salir de najas y no volver a intentarlo en mucho tiempo.

Tiene el lugar esa mezcolanza a marisco de peligrosa ingesta, casi de garum, y el propio de Dinamarca, casi de banco de iglesia, una fusión que le hace único e inimitable, nada que ver con el de la amorfophallum titán que tal como su propio nombre indica y por su brevedad solo habría que esperar a que se abra la flor, y muestre el capullo que guarda, una vez cada cuatro año, cuando en este caso que nos preocupa, mas habría que abrirle varias puertas para que se ventilase el laberinto, o cuando menos colocar en mejor distribución las existentes en su mitad inutilizadas.

Este será un planteamiento para formular en cuanto me llame la responsabilidad, y mas tranquilo, en su despacho oficial, saboreando un cafecito, exponerle junto a otros argumentos la necesidad de que se coloque la puerta que sobradamente tiene información al respecto, mas cuando el tiempo transcurre, como la floración de la amorfophallum titán, y se le pueden acumular el trabajo de cuantas actuaciones le quedan por hacer en este tiempo que tanto cuesta contentar a todos.

El participar en las jornadas de ENAPPAL, para explicar lo ocurrido en este enclave al gran grupo de representante de asociaciones patrimonialistas venidas de toda Andalucía al efecto, me hizo releer parte de la documentación que existe en esto de lo de la Encarnación, incluida la Sentencia del Tribunal Supremo, y aun me resulta inexplicable no solo la desviación sufrida, o el costo de 4.4 Millones de euros en equipamiento de la plaza de abastos, es decir 18 millones de las antiguas pesetas por cada puesto, tampoco el laberíntico diseño, ni los materiales empleados, menos el destino de los cinco millones del Plan E, para nada lo de las penalizaciones por demora, ni tan siquiera la aportación en metálico que tenia otro destino, sencillamente lo que me sigue sorprendiendo es que tanto el alcalde anterior empeñado en acabar aquello, esgrimiendo que luego se exigirían responsabilidades, como el alcalde actual, con el que tengo en espera su llamada, que, cuando siendo candidato, también afirmó en alguna comparecencia de campaña, que no dudaría en buscar los responsables de este despilfarro, y ya ven. Me sigue dando en la nariz que, lo mismo si abre de nuevo la flor, y lo de la Encarnación mantendrá su olor especial.

Sevilla a 26 de Mayo de 2014-

Francisco Rodriguez Estevez

 

miércoles, 21 de mayo de 2014


En la mesa

 

Una nueva mesa para hablar sobre “El político ante el planteamiento urbano. El control de la legalidad”, después de la Sentencia del Tribunal Supremo.

Resultaba de interés saber, y así nos lo hizo saber el orador en su intervención,  que los técnicos en la administración tienen, a tenor de cuantas leyes, normas y reglamentos a los que atenerse, pues más que la propia responsabilidad, la gran dificultad en el acierto de su dictamen, ya que este servirá en la mayor parte de las veces como documento para la toma de decisión del político en la responsabilidad. Firma el Secretario.

De nuevo lo de la Encarnación, viene a demostrar lo caro que resultó el capricho, pues no haría falta técnico para evaluar la interpretación de algo tan simple como la Ley de Accesibilidad, que al menos esta es facilita, tal como pudimos saber de las que gustaba al propio Seneca, es decir que sea tan sencilla que pueda ser entendida por todos, y de esta forma se evitan las interpretaciones generalmente manipuladas a conveniencia.

La reunión fue de enseñanza en enseñanza, no solo supimos como estaba definido en otro tiempo el casco histórico de esta ciudad al objeto de impunemente poder llevar a cabo actuaciones en el caserío que de otro modo hubieran estado bajo sospechas, si no que aparte de un sinfín de artículos de leyes en el que el experto hacia gala de una excepcional memoria, pues como que, entre un gran numero de latinajos de los que se emplean en el lenguaje de los doctores en derecho, se nos ofreció una de las frases atribuida a Tácito, gobernador romano en la que venia a decir que cuantas mas leyes, mas corrupción.

En definitiva lo de la Encarnación, en la que existe la sentencia del Tribunal Supremo de la Junta de Andalucía, lo mismo ni se sabe, ni se sabrá, si en los procedimientos que puedan llevarse a cabo, al final de todo acaban encontrando solución y lo contrario, (cosa muy dada en estos líos del si pero no),  pero de lo que no existe duda es que esta actuación en el centro de la ciudad de Sevilla, cuando menos tuvo un concurso cuestionado, con unas ambiguas bases, un jurado representado, una adjudicación fallida, un concurso de construcción otorgado a la baja, mil modificaciones, un informe técnico calificando el proyecto de imposible, una excavación arqueológica en la que resulta inexplicable que donde los aparcamientos no estuviera la Procula Julia, donde los incrementos de los costos fueron desproporcionados, donde la demora no se ha penalizado, donde no se han buscados responsables, tal como solicita el propio Secretario municipal, donde la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía  ni se mira, y  la fuente mas antigua de la ciudad se la convierte en pileta.

Podríamos seguir pero como de lo único que tengo algún conocimiento es en plaza de abastos, en esto que cuesta llamarla plaza municipal de abastos,  que mas se hace laberinto, en la que aparte del diseño de ruina, le dejaron 36 enormes columnas para impedir la diafanidad de estos espacios públicos, donde ni le apareció la sostenibilidad para el ahorro energético, y la colocación de las puertas es den un grosero desconocimiento de los espacios comerciales, donde ni por asomo se tuvo un estudio de la aplicación de la luminosidad correcta, tanto en luz solar directa, como las deficiencias en la eléctrica.

Que decir de los materiales empleados, de su altísimo costo, y pésima calidad. Del color de los paneles del fenólico de un amarillo inadecuado, el poroso suelo de granito de difícil limpieza, de los olores, de los filtros y la nula renovación del aire, de los errores en las medidas de los mostradores, de la falsa uniformidad de los puestos, y  por que no recordar la reducción del numero de comerciantes en detrimento de un espacio que ni ha sido ni será nunca la prolongación de la 5ª avenida de Nueva York.

Pero lo que no tiene ninguna justificación es que con tantísimas gente alrededor nadie tuviera la ocurrencia de abrir el Reglamento de Plazas Municipales de abastos en vigor para echarle un vistazo, hubiera bastado eso, que por cierto tiene un articulado tan clarito que cualquiera lo hubiera entendido incluso en el propio Ayuntamiento. Tanto gobierno responsable de lo llevado a cabo, como la irresponsable oposición.

Por mas que el ponente tratara de explicar cual dificultoso es elaborar un informe para poder acatar todas la leyes, reglamentos y normas, en lo de la Encarnación es evidente que ni la comisión de placeros, nombrada al efecto estuvo a la altura, pues como era de temer todos tenían en mente, como ha podido comprobarse a posteriori, que no tenían mayor interés que en acabar aquello como fuera para salir de najas. ¡ A correr! ¿Pero..... y los informes?  

Lo mismo tampoco existe, por el momento,.la más mínima intención de llevar acciones paliativas, que permita la mejora de aquello en tanto en cuanto pueda alcanzar el dorado retiro, y no tengo que esperar que se acaben los plazos de apelaciones y recursos que evidentemente permitirán que el hecho consumado dure lo que dure, y como podéis imaginar, no lo resistiría.

Sevilla a 21 de Mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

martes, 20 de mayo de 2014


Visita de Monteseirín y Celis a las setas de la EncarnaciónQue decir

 

Cuando aun solo era un enorme agujero, me llegó una señora al enjaulante  puesto del provisional, para decirme, (posiblemente sabiendo mi actitud en este asunto) algo que ya se intuía en lo que estaban haciendo en el solar de la Encarnación, a poco de mirar aquello. Evidentemente su acertada apreciación, que también compartía, era algo que no todos podían vislumbrar.

El caso fue que al cabo de unos años,( pues la demora eternizó a la provisionalidad) tuvo a bien, quien es reconocido escritor y poeta, ir a verme para hacerme una indicación al respecto, y que por supuesto no le hice el menor caso, pues no venia a cuento considerar que escribir sobre lo de la Encarnación, según el, era una perdida de tiempo.

No obstante me dejó el argumento para que escribiera otra de mis cartas al director, durante aquel tiempo de fortuna en el que me las publicaban casi todas, no así esta, que escribí para dejar testimonio de su sugerencia, y que hubiera quedado en su magistral pluma de premio, pues venia a contar lo que había anotado en un papelito que sacó de su bolsillo.

La cosa no era de su creación, pues se trataba de aquello que sobre la Encarnación  le escuchó a un hombre de dificultoso caminar, pues al parecer tenia problemas en una de sus piernas (a tenor de los gestos  explicativos de vaivén que realizaba) cuando aquel mascullando acertó a decir al mirar hacia los primeros tablones,  que en aquel tórrido verano ensamblaban los técnicos alemanes.

Una vez comentada las circunstancias de donde, como,  quien y que era lo que había escuchado, me hizo participe de tal nueva, que por vieja no vino a cambiar la que desde hacia varios años teníamos por sabida, y no solo por aquella señora que comunicaba su  malestar con anterioridad, también el de muchas personas en su pasar cerca de aquello, se les podían oír verdaderas perlas, con tal parsimonia al hacer, como su atropellamiento en decir, que desvelándome la anotación con tal secreto mas parecía un numero de magia. ¡Qué, canallada!  Esa era la frase, ¡Que canallada!

Que decir, que después de mas de tres años de que el laberíntico diseño de la plaza de abastos pusiera fin a la provisionalidad, y haber oído en innumerables ocasiones lo del mamarracho, para calificar a esta plaza, e incluso recordar a aquel deficiente mental que cuando vio como estaban colocadas las puertas exclamo, ¡Ofú, que tontería!, hoy he tenido que volver a escuchar lo de la canallada, tal como al principio.

Posiblemente la cosa tenga pocas soluciones,  sin embargo ahora la canallada estaría en que no se aplica ninguna de las posibles, al menos para mejorar esta extraña plaza municipal de abastos, que de forma tan deficiente,( y no solo por las aleatorias puertas que incumplen con la Ley) ni se acercó a lo dispuesto en el reglamento de mercados de abastos municipales, cuando se llevó a cabo  a ultranza por los responsables, y  que decir de los irresponsables. Eso, que decir.

Sevilla a 20 de Mayo de 2014-

Francisco Rodríguez Estévez

lunes, 19 de mayo de 2014


Las cuentas del cuento

 

Mira que es viejo el cuento, que hace de la fabula todo los números, como para que en esta modernidad, en esta vanguardia, donde sesudos economistas y asesores hicieran los suyos, que mas parecerían “lecheras”, por semejante suerte que nada importaba con tal de lograr acceder al mercado.

Que fuera imposible, que no tuviera pegamento, que se modificara mil veces, que se perdiera el pasado del Imperio, y los patios de arrayanes del tiempo del turbante, que los placeros fueran jibarizados, en una mutilación al punto de extinción, para luego enjaularles en un laberinto donde queda un reservorio que en un ridículo numero no pervivirán tanto como lograron en la provisionalidad eterna. Pero que puede importar nada de esto en este número de las cuentas. La vanguardia de la modernidad, el paseo en la nube, `por mas que por seguridad se hiciera inútil puente del mirador social, y la sinuosa calle nunca llegará a prolongar la 5 avenida de NY, ni la sostenibilidad aparecerá por ningún lado, ni se cumplió la Ley de Accesibilidad, ni el Reglamento municipal de plazas de abastos.  Cuentas y cuentos.

La adjudicataria, con su oferta de rapidez, resulto la elegida en detrimento de las otras ofertas lago mas lentas, si mal sufrió cuatro años de demora, y con una menor cuantía para las aportaciones municipales, con respecto a las concurrentes, aunque luego las cuentas fueran del cuento, y además del efectivo abonado, procedentes de aportaciones externas para otras actuaciones, tuvo su complemento en especie, con la desafectación de un edifico publico por 40 años, y por el momento, durante tres años, no contabilizados,  tuviera concepto de alquiler en beneficio de la demorada, y añadiéndole además los posibles ingresos de la explotación  de todo el polietapico y multidisciplinar complejo, nada menos que por cuarenta años, pues resulta, que con todo ese montante ahora las cuentas no le salen. El eterno cuento.

Tienen los negocios ese punto de imprevisión en el cualquier cosa puede estropear todos los planes, cual lechera camino del mercado, ya que son muchas las veces que si bien no se parte la cantara, lo mismo hay que beberse la leche.

 El cuento es sin duda de que con toda seguridad hicieron las cuentas mal, en el departamento especializado, pero las cuentas ahora están en como encontrar la forma de que el cuento acabe de entrada de otra forma. Puerta al futuro.

Sevilla a 19 de Mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

 

 

sábado, 17 de mayo de 2014


Incontable

 

Dícese de lo que no se puede contar. Pero lo cierto en este caso, es que por el importante numero de personas que buscaron hoy la puerta en lo de la Encarnación, ¡fueron tantas!, que para que os voy a contar.
Aparte de que se pueda contar o no el gran numero de personas, ya sea pequeño, incluso rojo, o de circo, que a diario ven frustrado su intento de pasar al laberíntico trazado de la plaza municipal de abastos, el caso es  que cuento los días pasados  y que entre una cosa y otra aun no se ha producido la llamada telefónica, para “mas tranquilo, tomando un café en el despacho oficial” poder volver a contar lo que es publico y notorio, la puertas, y por lo tanto  tampoco hay nada que contar por ese lado.

Los que si vinieron hoy a saludarme, todo un detalle, fueron algunos de los indignados que se habían dado cita en la plaza de la mayor indignación, segundo aniversario, y como están al tanto de la indignación que produce lo de la puerta, naturalmente saben como las dos responsabilidades en este asunto mas que indignación causan perversión al comprobar en vivo y en directo, cuantas personas tanto hoy, como a diario, se llevan el chasco de una lamentable toma de decisión, al ignorar ambas “responsabilidades” la responsabilidad de que cuando menos la Ley es algo que debe de cumplirse, y no solo la de Ley de Accesibilidad, pues una vez puesto, para que contarles, que la de Patrimonio Histórico de Andalucía se ha vuelto una gesta incontable, un gesto a la desobediencia, la de Sostenibilidad en los edificios públicos mas que milonga parece cuento, el mismísimo PGOU un zarandeo, una broma, y que decir de la sentencia del Tribunal Supremo de la Junta de Andalucía, sin olvidar el Reglamento de Mercados municipales de Abastos en vigor. Incontable.

Pues todo estas son como incontables causas, pero que se pueden contar, o que no se pueden contar, por la sencilla razón de que mas parecen que lo de la Encarnación sea algo incontable, pero que se sabe desde el principio.
Eso al menos hasta que se pueda saber, pero de verdad, por cuanto salió el capricho, con datos contables, pues de otro modo no dejara de ser algo incontable, posiblemente inflado, insostenible, e incompresible, mas, pare usted de contar, pues de seguir contando, lo mismo ni el café, ni la tranquilidad, ni el despacho oficial, pone la solución a esta indignación que de “entrada” no se le quiere encontrar la “salida”, evidentemente me refiero a lo que siendo incontable, es decir que no se cuenta, pero que sigue siendo importante que a la puerta automática se le abra una cuenta de pasos. Cuando menos.

Sevilla a 17 de Mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

lunes, 12 de mayo de 2014


Sin saberlo

 Los anglicismos y los mensajitos crean de continuo nuevas palabras que sumándolas a las que el diccionario de la lengua nos descubre cada día, como que tenemos al esperanto superado. Nuevo idioma.

No tenia ni idea de que hacer una foto de uno mismo se le dice selfty, siendo pues self la traducción del ingles, de “lo propio”, “de uno mismo”.

Pues resulta que cuando me diagnosticaron la vasculitis leucocito clástica purpúrea palpable, producida por la acción  de las partículas odoríficas de un espacio cerrado, lo cual seria enfermedad laboral,  y que también podría ser como causa del ibuprofeno recetado y con una posología inadecuada, cosa mas difícil de admitir por el especialista al no considerar la posible reacción,  lo cierto fue que perjudicaron  la piel no solo las piernas (que en principio fueron las mas afectadas) también los muslos, el de la pierna izquierda en la parte anterior, y el derecho en la posterior, sino que, cuando iniciado el tercer tratamiento, una vez desechada la psoriasis, y  luego la eczema tópica, empezamos un tratamiento con  corticoides por lo cual se inició la mejoría, pero  sucedió que la purpúrea empezó a invadir la bolsa de los compañones y llego hasta el mismísimo black budin, por lo que el dermatólogo hizo gran cantidad de fotos, las mismas que en casa, sin saberlo, realicé  en selfty, las cuales me sirvieron posteriormente para cuando, por dos ocasiones en las que cambiaron al especialista, no tuve que mostrar la barba para confirmar el pronostico, como conchita salchichagorda.
En casa las salchichas son de alta calidad, autenticas caseras y con formula de la propia familia que de siempre lucimos mostachos.

Viene esto a que la canción ganadora de la Eurovisión, tiene ese componente misterioso y peludo por saber si lo de conchita es por el biso del mejillón, y lo de wurst por la morcilla, pues siendo así, las barbas del travestido Tom, por el momento, viene a ser un hipocorístico de lo que se trae, si no entre manos, al menos entre las piernas. ¿Carne o pescado?

El éxito conseguido, dicen los expertos, en barbas o en almejas, (o en morcillas) ha estado en la provocación, en la trasgresión, como lo de las setas de la Encarnación, por lo que visto lo visto, lo mismo cambio el profile y cuelgo en el muro la foto de mi bolsa escrotal en carmín y la black budin con pintas de lunares granas, como los madroños de la carreta de mi prima. Cosa fina.

Por otro lado, siendo fiel a mi mismo como si fuera un selfty de los de toda la vida, y sin tener que explicar lo que cansa hacer de cómitre en esta nave que está que arde y además tiene perdido el rumbo, si lo que procede ahora es esperar hasta que se abra la puerta, aunque sea lentamente, tal como hace el diastema en los incisivos, pensando que  con las elecciones tan cercanas como que lo mismo tiene esto una aceleración, y aunque solo sea por acatar la Ley, el Alcalde está por cumplirla.

Sevilla a 12 de Mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

sábado, 10 de mayo de 2014

Una foto de Jane's Walk Sevilla.

La cita

 Después de la  breve visita de la autoridades, donde lo de la puerta se quedó en la broma del “estor”, no me quedó mas, por el momento, que esperar la llamada que me ofrecían, para  “mas tranquilo" y en despacho oficial, poder tratar este asunto, aunque entiendo que es algo archisabido.

En esto que llegó el Jane Walk, que en estreno en Sevilla tuvimos la oportunidad de mostrar este travestido lugar  con un paseo al pasado hasta esa Encarnación  amable e inexistente en la que crecí, y que intencionadamente soslayé hacer comentarios tanto del mercado derribado, aquel que estaba perimetrado por acacias blancas, como también obvié  hacer cometarios sobre este icono del tiempo rosa.
Apenas unas palabras sobre la placita romántica circundada por los raíles del tranvía, por mas que los parterres “amebas” estuvieran contaminando visualmente, junto con el transgresor estípite la fuente mas antigua de la ciudad, de cuyos surtidores manaba leche, miel aguardiente y mistela, protegida por la Ley de Patrimonio.

Muy de pasada un comentario sobre la fuente Sur, y el rapto de Ceres en el “trimax”, y mis deseos para rescatarla de este segundo encierro, y pueda mostrar los pugnases pechos que modelara Vasallo en este fanal en el que encerraron a los lasos placeros.

Todo, según los asistentes y los organizadores resultó ser un éxito, pero, como dijo el alcalde, “más tranquilo”  y en otra ocasión le llenaremos con mas contenido.

Cierto es que han pasado muchos días, y en la tensa espera de la cita con el Alcalde, lo mejor era esperar, pues lo de la puerta sigue siendo un fiasco para los turistas que inútilmente tratan de encontrarla, y como podéis pensar crece una mas que lamentable situación para un negocio engullido por los gastos, y sin mas posibilidades para que llegue el publico que la colocación de una puerta automática.
Puerta que cumpla con la Ley, y evite que por higiene el pasamano sea lugar de contaminación.  

También ha estado la feria de Abril, lamentablemente en Mayo, por cuanto el calor, pues soy de los de feria de día, me han hecho estar un par de dias en casa, el jueves, y hoy sábado, que he aprovechado para daros noticias, y la ultima es que para la semana próxima tengo que participar en ENNAPAL, que es el conjunto de agrupaciones y asociaciones patrimonialistas, para en acto publico difundir esto de lo de la Encarnación. ¡Ya sabéis! Irá lo de la puerta. Es de Ley.

Sevilla a 10 de Mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

sábado, 3 de mayo de 2014


Furgo es furgo

 
Después de haber tenido la suerte de cantar en estreno mundial el himno Eucarístico en el Altar Mayor de la Catedral de Sevilla, después de haber estrenado también mundialmente el Himno de la Esperanza Macarena, la suerte me deparó estrenar “los paseos de Jane” en esta ciudad. Lo cual es motivo para que afloren los nervios en el mejor deseo de que todo salga bien.

El caso es que, por suerte, las previsiones de los cincuenta paseantes, sobre las setenta peticiones de asistencias, no se cumplieron, pues ya me aterraba tener que explicar lo de la Encarnación a tal número de personas, y en definitiva solo fuimos veintidós, que no está mal, es más creo que es el numero idóneo para contar en un paseo como la ciudad devorándose a si misma se transforma, y a través de la voz hacer ver lo que no existe, y encima siendo un paseo al pasado. ¡Me ocurren cada cosa!.

El caso es que hablar de lo de la Encarnación, ni te explicas tanto interés y por eso dejamos intencionadamente excluido el antiguo mercado, y lo de las setas, lo comentamos muy de pasada, pues solo al final, en la calle que definieron como la prolongación de la 5ª Avenida de Nueva York, sinuosa calle cubierta de esta sinergia del comercio, en la que finalizamos el recorrido, el grupo, algo disminuido, tuvo información oficial de tres informes demoledores. Cimentación, Costo-Demora, y Sentencia, amen del incumplimiento de la Ley de Accesibilidad, Ley de Patrimonio de Andalucía, y el propio Reglamento de Mercados Municipales de la Ciudad de Sevilla en vigor.

Así que el paseo entre anécdotas y poesía, con algún que otro dato y fechas históricas, me dejó varias cosas por decir, pues después de mas de una hora aun nos quedaba todo el Sudeste, y el Sur, y como no la fachada Sur con la fuente de piedra, y la Diosa Ceres, de la que con anterioridad había relatado el rapto con el “trimax”. Esta anécdota que me falta la tenia para cuando la Plaza de Regina, donde lanceaban toros, que en mi infancia era lugar ideal para jugar a la pelota.

Tenia una de color azul, era grande, botaba descontroladamente, esto debió de ocurrir cuando tenia unos seis o siete  años, ni que decir tiene que ningún chiquillo tenia una pelota, menos del tamaño de esta.

Casi siempre jugaba solo golpeándola torpemente contra la pared, o en ocasiones mi tía Clement hacia de portera en la persiana de Los Lobitos. Ni que decir tiene que  a nada que esto ocurría  se empezaba a formar un corro de niños ávidos de dale una patada a aquella preciosa pelota azul. Ocurrió que mi tía dijo "venga vamos a jugar un partido" (cosa que ni sabia lo que era) el caso es que de inmediato todos corriendo por la calle Regina dando patadas a mi pelota azul, en una de estas, los niños del corral del siete, que eran listos como el hambre, le daban  fuertes voleones a mi pelota en un partido en el que todos corríamos detrás de la pelota.
En esta que, cuando fui a golpearla con la mayor fuerza, como hacían ellos, ocurrió que al mismo tiempo otro niño al que le decían “El Alí” al intentar darle la patada me la vino a dar en mi pierna derribándome, por lo que en mi protesta de dolor por el golpe, y de rabia por no haberle dado una patada a la pelota le protesté, y este me dijo, “Que quieres nota, el furgo es furgo” y de inmediato mi tía suspendió el encuentro de mi primer partido de furgo.

Me vino a la memoria pues recientemente ha desaparecido un gran entrenador que se hizo famoso por esta frase que hace más de 60 años ya la escuche decir. Posiblemente en estreno mundial.

Sevilla a 3 de Mayo de 2014

Francisco Rodríguez Estévez