viernes, 17 de octubre de 2014

 La encarnizada
Parecería que fuera cosa de la Encarnación, pero se trata de una fruslería, pues en eso ha quedado la encarnizada lucha que los placeros, antes vendedores, que fueron industriales antes que comerciantes cooperativistas, y ahora subarrendatarios de la cocesionaria, a la que por despótica actitud hacia el inquilinato, y desprotegido por la  negligencia que demuestra la administración, habían lanzando una ofensiva de papel, lucha encarnizada, posiblemente con el vano intento de resetear la situación.
Basta ver que la carteleria de choque cada vez se hace más escasa por las deserciones que pueden observarse con solo mirar los frontis de fenolico, lo cual demuestra el escaso interés en continuar la encarnizada lucha iniciada. Sera un batalla perdida, acaso injustamente perdida, pues si la administración llega a permitir el intrusismo de la concesionaria, y esta puede modificar los fundamentos que obra en los contratos establecidos con los titulares de las licencias de venta en mercado municipal, quedando explicitado el numero de los puestos y la especie que cada uno tienen asignada, sin que la administración haga valer su responsabilidad, pues ya me dirán.
Una débil carta dirigida como protesta de las desatenciones que como empresa encargada del mantenimiento, limpieza y vigilancia en lo que atañe solo a las partes que corresponden a unos límites indefinidos que componen el mercado municipal de abastos, ya sea zona de carga y descarga, zona de almacenes, servicios y lo propios de venta, incluido en cuarto de terminales eléctricos donde está peligrosamente instalada la oficina, sin que por el contrario existan las de los servicios municipales de dirección y la de veterinario.
Con la ausencia del sistema de renovación de aires, con la salida inadecuada de los que son expulsados calientes, y contaminados por los olores, que además de impregnar al paso de la ponzoña hace que se note en el interior un desagradable olor impropio que ya en cuatro años deberían de haber encontrado la solución. Que contar de las puertas automáticas, obligatorias por Ley de Accesibilidad, o la caprichosa colocación de las que dispusieron de pesadas hojas donde las manos pueden ser fuente de contagio.
La encarnizada lucha llevará medidas, acaso poco acertadas, pues son pocas las que frente a los hechos consumados de dispone, y la administración no está por la labor de exigir a la concesionaria que retorne al punto de partida, pues en todo caso la falta de actuación no será negligencia será pues consentimiento, por lo que la encarnizada cuerpo a  triple cuerpo con este Gerion que surgió del espanto de los mas bastardos intereses, crear la desigualdad, desequilibrar lo existente, y no llevar a cabo ninguna acción paliativa y regeneradora de atractivo para el público. A todo esto sin disponer de un dardo envenenado con la sangre de la Hidra para hacer certero el blanco, mas parece que la encarnizada tendrá de encarnizada eso, como siempre, cosa de la Encarnación.
Sevilla a 17 de Octubre de 2014

Francisco Rodríguez Estévez

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