martes, 31 de julio de 2012

Misterio




Evidentemente no hay ninguna duda acerca de que lo de la Encarnación es el mayor de los misterio, salvo conocer cual puede ser la respuesta, que se obtendría en referencia a lo de la puerta, ya sabéis.

Para los que desconozcan el asunto, sirva la información de que en lo de la Encarnación realizaron un extraño diseño llamado comercial, dentro de un no menos rarito espacio, y a tenor de que lo que salió fue un laberinto, no tuvieron otra que llamarlo mercado y ubicar en semejante sitio a los pocos placeros que quedaban en el reservorio de la provisionalidad.

Eso seria lo de menos, lo peor es que al gabinete técnico, y al conjunto de asesores y supervisores, les vino en gana colocar las puertas de una manera aleatoria tal que en el lugar que la lógica lleva a las personas a buscarla, se encuentra que allí no dispusieron, (en el concienzudo estudio) colocarla ninguna puerta. Lo cual,vista la necesidad, hace que se solicite su instalación al objeto de paliar esta deficiencia.

Pero no crean, no debe ser tan facil abrir en lo de la Encarnacion, una puerta de cristal y aluminio, con un costo aproximado de 1200 euros una, 2000 euros dos, que la cosa esta mu malita.

Por un lado tenemos a los placeros con un dilema que ha surgido de la falta de luces, que ese es otro tema, pues están convencido de que la empresa adjudicataria concesionaria solo dispone en tesorería de fondos para realizar un sola puerta, en cuyo caso el análisis que sin estudio previo toman es que la única puerta que debido a la debilidad economica puede colocar la empresa, pues que se coloque en otro lugar, (otro capricho, otro misterio), posiblemente por donde nadie la busca.

Por otro lado tenemos a la empresa, que en principio informó de que tendrían que pedir la puerta nada menos que a Alemania, lo cual se hace lejo y ademas encarece los portes, posteriormente ha caído en un no pero si y en un si pero no, que me lo pida la Delegación, lo cual la próxima respuesta, puede ser otro gran misterio.

Y que decir del delegado, que si, que si, que la puerta ya esta aquí, y ahora al estar informado por los placeros que solo hay dinero para una sola puerta, pues busca el consenso, por que emplear manu militari, donde la gobernanza indica que guarde silencio, y deje pasar los días, y efectivamente pasan los días sin que se resuelva el misterio de su coherente respuesta sin pregunta. Se va a poner la puerta, si, o no. Una, o dos.

Y entonces, para que seguir con lo de la modificación del perímetro de la barreduela de cristal que para guasa del alemán de las paredes curvas, aquí se le sigue riendo la gracia, y poder disponer del espacio para la puerta, naturalmente automática, y también poder colocar la escultura de la diosa Ceres, esa que ya casi nadie recuerda que estuvo en la Encarnación cuando aun era plaza de abastos.

Sevilla a 31 de Julio de 2012

Francisco Rodriguez Estevez

lunes, 30 de julio de 2012

Puertas y puertas  


Acabo de recibir este correo, y como en todas partes existen puertas, ya sea para entrar o para escapar, como si de un laberinto se tratara. No desvelo a su autor, aunque el deja el recuerdo de su infancia en un pueblo de Granada.  
 
Puerta abierta entiendo que es el Puente de Triana.
Torre Pelli: Puerta de la estulticia, como si le pudiesen poner puertas al cielo; mazacote, que precisará una electrificación al modo de un planeta en pleno crac
medioambiental; acto especulativo planificado para llenar bolsillos sobre una
ciudad maltratada (en su imagen, en su paisaje, en su altura) puesta en el
escaparate: ellos sí que defienden una Sevilla de peineta.

No compartió -aunque tampoco me dio la impresión de que le importara demasiado
cómo quitó un nuevo alcalde una fuente de los leones prefabricada colocada en
las eras de Restábal, paraje en el que la conocida aparición de tumbas en el
subsuelo, durante la construcción de los cimientos de las escuelas en el
franquismo, daba por cementerio antiguo; más tarde, se pavimentó un pista
polideportiva que aún persiste y que cercaron con una baranda metálica que
mataría a un niño sobre el que cayó. Puerta entornada la de los cientos de pequeñas comunidades locales de un país en el que se especula con fulminarlas de la organización jurídico-pública, o jibarizarlas; no se plantea optimizar sus costes,sino reducir munícipes,representación.
Torre Pelli de los infiernos la fusión de entidades locales con el fin de satisfacer
ntereses centralizadores.
Si para algunos eruditos de la Administración local en España, el origen de ésta pueda estar en el funcionamiento de algunas comunidades bárbaras en el tardo Imperio, cómo podríamos encajar tales designios de raquitización; no se trataría de limitar el nepotismo u optimizar gastos. El pueblo donde se crio fue fusionado al final del franquismo, error que entorpeció la posibilidad de gobernanza más directa que pudiese haberse implementado con el advenimiento de la democracia. Fue él quien me habló del contubernio.

Puerta abierta podría ser el conocimiento de las relaciones de parentesco
entre las personas que tomaban las decisiones en el Ayuntamiento de Sevilla
concedente de las licencias que daban cobertura de legalidad al mamotreto y la
entidad promotora del mismo. Y puerta abierta mi interés, mi correo y mi
persona, para conocerlas y tratar de proyectarlas en un sentido tumbero.

Otro amigo me comentó que en Irlanda están tirando edificaciones como salida
de la crisis; aquí, en cambio, dan tregua a las llamadas a tirarse que ocupan
el dominio público en las costas, cosas del marianismo.

En algun lugar, a 30 de Julio de 2012

miércoles, 25 de julio de 2012

Calle del perro




De Laraña, a La Venera, que viene a ser largo trecho, es la visión panorámica que desde la gran ventana me permite cada día observar esta desierta calle que antes se llamó del perro. ¡Como ha cambiado!

No parece que todo su silencio actual le venga por la situación económica que no se acaba de atravesar, pero hay muchos momentos en el día que puede advertirse que no transita nadie, lo que se dice nadie, por los mas de setenta metros que ocupa la antes populosa y céntrica vía comercial.

En esa franja de visión, tan desvirtuada por la reciente actuación en la que entre la invasión de la escalera (que modificó la alineación medieval) la fuente bulto sin estrenar, las farolas de báculo, el mamotreto de servicios, el kiosco cerrado desde hace años, las barandas del parterre, las del lucernario, como aparcamiento de bicicletas, el camión bomba de los desatascos semanales, y los bancos de piedra, como que le dan a aquello de un cosmopolitismo tan extremo, que por nada del mundo puede hacer al visitante creer donde se encuentra. Se diría que con las sombrillas, mesas y sillas, aquello que fuera placita, perimetrada de arbolitos de sombras amables, hoy la mitad desaparecidos en combate, ofrece en la actualidad una imagen cuando menos rara, a nada que se crucen dos vehículos.

Los bares, que nunca pudieron sacar los veladores, con el cambio llenan la calle para que los clientes puedan fumar mientras desayunan, e incluso algunos grupos, horas mas tarde, tomen el aperitivo bajo un Sol de justicia.

En la barreduela de cristal, los pocos turistas que descienden por la escalinata de granito, y alguna que otra persona, e incluso familias, siguen buscando una puerta. Pero puerta no hay. Me preocupa mucho mas a estas alturas, y después de todo el tiempo transcurrido, la actitud irresponsable, en este caso, de quien, o quienes pueden, o deben de tomarla, que los comentarios que se llegan a escuchar al respecto.

En ocasiones el transitar de las personas es prácticamente nulo, se pasan los minutos sin que aparezca la siguiente para contabilizar el numero de las que cruzan la imaginaria línea de meta. Desde la observación se comprueba el alto numero de personas mayores con capacidad reducida, (algunas con autonomía propia gracias a los vehículos motorizados) pero mayoritariamente las empujadas por la persona que le acompaña, y es que en las mañanas son paseadas por este tranquilo lugar. No parece en ningun caso interesarles para nada entrar en el laberinto de la plaza, ya tenga o no la puerta, pues casi todas tiene la mirada en otro sitio, y la comida en el centro de mayores. La plaza ya no es lo que era, ni nosotros. Ni Santiago es fiesta.

Sevilla a 25 de Julio de 2012

Santiago, Patrón de España

Francisco Rodríguez Estévez

sábado, 21 de julio de 2012

Bajo la carpa

La tontería






Sucedió hace ahora diez años, ¡quien lo diría!, toda una década transcurrida desde el suceso, por lo cual es posible que pocos lo recuerden a pesar de lo rápido que corre el tiempo que mas parece que fuera recién acaecido.

Fue una mañana algo mas calurosa de las que con normalidad cada año nos traen los días señalaitos, el solar estaba preparado para el acontecimiento, los operarios, en especial los arqueólogos e historiadores de la empresa Sectur, se habían afanado en adecentar la excavación, que mas parecía escarbacion, por cuanto era un trabajo al que se le había fijado el tiempo de duración, y apenas se podían reparar en lo que se estaba destruyendo. Unas macetas con siemprevive.

Una gran carpa marbellí para un ágape ofrecido por la fidelísima constructora, y el trípode preparado para bajar la caja metálica con toda la parafernalia de objetos para la memoria.

Por suerte para mi no me invitaron, en cambio, tenía previsto, hacer una visita unas horas antes, al objeto de situar a los arqueólogos en referencia al desaparecido mercado, pero el guarda de seguridad tenia bien fija mi imagen que ni colocándome un chaleco reflectante y el correspondiente casco me permitió la entrada. ¡Usted, no puede pasar!

Me sigue pareciendo una tontería, pero acaso era la única persona que públicamente había rechazado el proyecto sótano que tanto aplauso arranco en aquellos que detentaba la representatividad de los callados placeros, y el beneplácito consentido de los asesores.

La delegada llegaba con retraso, y ciertas prisas, pues tenía compromisos ineludibles en los actos que la esperaban en Triana.

Llevaba un vestido de gasa de color verde manzana, casi pastel con de talles de tonos anaranjados, que la favorecía. Acaso como burla, paso delante de mi puesto, mostrando la blancura de una dentadura casi perfecta pero algo grande en su boca, en una forzada sonrisa de felicidad en la victoria que estaba a punto de alcanzar, colocar la primera piedra y todos los placeros aplaudiendo para la foto.

Recuerdo que no me pude resistir, y le dije en voz alta un refrán desacertado, pues ahora pienso que me tenia que haber limitado a saludarla, y que con su pan se lo coma, pero la mala elección la confundió y le encontró otro sentido por lo cual como un resorte se volvió para decirme muy enfadada ¡Esto, no hay quien lo pare!

El caso es que en menos de tres meses ya estaba fuera de su despacho y la Encarnación sufrió uno de los mayores parones.

No busquen la piedra, no la encontraran, la Encarnación no tiene piedra que en el futuro permita conocer lo que sucedía en el mundo aquel día señalaito de 2002, el proyecto alemán hizo coincidir el lugar donde estaba depositada, nada menos que con la rampa de bajada al sótano de servicios de carga y descarga, si mal suele utilizarse por los placeros como aparcamiento, que ya me gustaría acceder, pero las indicaciones son como cuando la piedra. Algún día, y lo mismo os cuento lo de la mona.

Se cumplen los diez años de una piedra inexistente en lo de la Encarnación, un proyecto inexistente, que ni tenia por autor arquitecto alguno, fue cuando se propuso que fuera aquel que tenia suficiente prestigio.

Era un ardid que no sirvió nada más que para animar a los que detentaban a los placeros, una estrategia para que estos y sus asesores, aplaudieran escaleras y depresiones, de un proyecto irrealizable. Pero era evidente que en otra cabeza se estaba pensando en un concurso, y dejarse de tonterías de mercado, es evidente que en la Encarnación estas no aparecieron solas. A la vista de los resultados, el emblematico resultó deturpado de solemnidad, por lo que se puede pensar que con todo lo pasado, lo de la puerta puede parecer, por muy serio que sea el asunto, mas que tonteria, piedra.

Sevilla a 21 de Julio de 2012

Francisco Rodriguez Estevez

viernes, 20 de julio de 2012

Tiempo sin espera

Dos mil diecisiete




Por lo pronto los analistas hablan de mínimo dos años para llegar al fondo del fondo, que nadie sabe donde se encuentra cuando hace poco el susto estaba en los 350 puntos básicos de la prima de riesgo, barrera del caos financiero si se llegaba a rebasar, y al de la fecha la prima esta, tan arriesgada como siempre, alcanza los 580, y no es que ni a estas alturas asuste, que por mi puede llegar,  si le parece, hasta encaramarse en lo mas alto del Burj Khalifa, que menuda es la prima en esto de arriesgarse.

Lo mas seguro es que baje, pues resulta evidente que, o se queda allí en lo alto como San Simeón el Estilita, o se pega un jardazo haciendo el salto de la cola de caballo al mas puro estilo de los clavados.

También puede ser que descienda poco a poco y lo mismo, en lugar de caer, se ponga del susto una línea de vida, ya que a su edad no esta para correr nada en ninguno de los sentidos, y menos que en plena bajada se descubra el pastel de la prima, y lo que se vea, manda huevos, sea otra cosa.

Espero, que para esa fecha mágica del 2017, me coja cobrando la jubilación, pues no pienso esperar pagando que llegue, por mucho que ahora se garantice que se alcanzará la normalidad. Es mas aunque abrieran la puerta, es demasiado tiempo.

Aguantar cinco años, que pasen cinco años, nunca está en nuestras manos, en un segundo se van al garete todos los planes. Cierto es que Gracias a Dios, me veo con fuerzas, pero cinco son demasiados años para esperar nada, mas cuando desde hace muchos años no he hecho otra cosa que esperar, para que nada llegara.

Desde algo más de año y medio, espero que coloquen una puerta, (mil veces prometida, y dos mil negada), con seguridad al objeto de mejorar unas ventas imposibles en un laberíntico mercado, y para eso aun tuve que esperar más de treinta y ocho años para que lo construyeran.

Que le puedo hacer si la situación es la que hay. Según los placeros, se necesitarían varias puertas para que aquello tuviera un sentido mas comercial, pero se ignora de donde han sacado la información de que la concesionaria solo tiene dinero para colocar una sola puerta.

El Delegado de Consumo, que atiende a estos comerciantes, entiende que efectivamente cabria la posibilidad de que se autorizaran otra puertas, cuantas fueran necesarias, pero que la Delegación no tiene recursos, ni los necesita pues seria una exigencia a la que estaría obligado a realizar el desembolso la concesionaria, pero informado por los representantes de la Cooperativa de la situación económica de la empresa, en lugar de comprobar este dato, accede a la petición de que se proceda a la apertura de una sola puerta, y en el lugar que se le solicita, naturalmente sin realizar un estudio técnico del lugar optimo para los intereses generales del mercado.

Y que dice la concesionaria al respecto, pues no dice nada, por el momento deja pasar días, le viene bien no sufragar los gastos de dos, o mas puertas, máxime si los placeros en sus luces, se conforman con una, y la Delegación no le hace la mas minima presión, ni tan siquiera para que esta sea automatica, ni mucho menos indicar que se puede distribuir con mejor criterio las que se colocaron en la calle cubierta.

De no colocarse la puerta (que estaría dispuesto a sufragar, pues ya resulta extraño que la constructora no disponga de las cantidades para ello), a ser posible aprovechando las bajas ventas de Agosto, y visto que es el costo de esta el único impedimento, pues tanto Delegación, como placeros, parecen que están de acuerdo en que una sola puerta mas es insuficiente, convendrán conmigo que vistas las actitudes, lo mas consecuente sea dejar la actividad comercial, cosa que desde el primer día llevo corriendo el riesgo, como la prima, para alcanzar algo, si no cumbre, a mi edad, al menos un buen y suave descenso , pero que sin paso, ni puerta para marcar el slalom, hay muchos días como el de hoy en el que cerrando se le pierde menos.

Sevilla a 20 de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez

sábado, 14 de julio de 2012

En parada

El paro




Tuvo esta encarnación de mis canas, antes de mis carnes, siempre el tiempo calmo. A lo largo de todo el que estuvo en la provisionalidad se le fueron acumulando los parones de las prisas. ¿Pero como volver a entrar de donde se habia salido?

Al principio todo fuera precipitación, pero en la desaceleración económica de la transición política, llegaron las pausas, se diria que hasta vino bien, pues las sombras del pasado aun eran demasiado alargadas como para discutir ideas tomadas con anterioridad, en el tiempo de los miedos, y en el tiempo nuevo nadie tenia idea de que hacer con la Encarnación salvo pararla, mejor aun, evitar que se moviera. ¡Era de temer!

Muchas de esas paradas empezaron una vez que se pasaron los años previstos para que se acabara el nuevo mercado que nunca se iniciaba, siempre anunciado y jamas llegaba.

Luego le buscaron otras excusas, se diría que con cada nuevo proyecto aparecía el clásico paroncillo que indicaba la falta de seriedad y estudio en los distintos procesos, estudios geológicos, estudios arqueológicos, estudios financieros, estudios de aplicación, estudios de apoderamiento del solar, por no hablar de dinero, y es que en ningún momento se contó con financiación municipal, y la de los placeros, era tan arriesgada para los bancos, que con los avales personales que estos presentaban (de aquellos que lo hacían en insuficiente numero) y los que ni aparecían ni para hacer la declaración de bienes, que se entrada causaba risa, por lo que la salida de la concesion se hacia irremediable e hicieron predecir que lo de la Encarnación nunca volvería a salir de la parada. Tendrían que ser otros dineros los que la sacaran, como un rescate, pero quedándose con todo.

En los mercado de Barcelona, los placeros se encuentran en unas paradas idealizadas, si se comparan con las jaulas del bidonville, aquellos son unos puestos ideales para realizar en el futuro, acaso fueran las únicas paradas, en lo de la Encarnación, que no fueran de tiempo.

El proyecto sótano, el de la Guerra, (aquella que vaticinó con un “esto no hay quien lo pare”, dos meses antes de que saliera del despacho de la Delegacion), fue un proyecto, neonato y sin autor, por lo que sufrió la mayor parada de todas, acaso solo superado por de las maderas, mas maderas, esto es la guerra, cuando las mentiras estuvieron a punto de ser confesadas. Las maderas ya estan aquí, ( quiso decir en Finlandia)

Las paradas fueron llamadas técnicas, cuando el sonar, de seguridad cuando era imposible, y de metodología cuando lo del pegamento. Más parecía que tuviera el patronazgo de San Eutropio, que lo es de Paradas. Parada de estudio, paradas de autobús parada de metro y gran parada.

Ahora la parada se hace notar en todo. Todo está parado Acaso sea el tiempo de encomendarse al santo pastor de almas, que luce en su cabeza, por diadema, un “jacha”.

Será pues mañana, como cada quince de Julio, compartiendo con San Buenaventura, en la vida Juan de Fidanza, en esta ciudad, horno, la fecha que nos recuerda que a ambos se les paró el corazón, lo que ahora le dicen entrar en parada.

En el corazón de esta ciudad las paradas tienen la entrada cerrada, y eso si que necesitaría un buen “jachazo”. En Paradas, saben de los milagros del santo, y lo aconsejable, en esta fecha que los recuerdan, sea encomendarnos a estos “pastores” que abrieron con la oración las puertas del Cielo, y lo mismo a esta de la Encarnación parada, lo que le falta no es financiación para abrir una puerta, si no unos Ave María

Sevilla a 14 de julio de 2012

Francisco Rodriguez Estevez.

viernes, 13 de julio de 2012

Sorteando todo lo que aparece
en una carrera hasta la plaza.

La rifa




Repasando los correos antiguos, esos que me cuesta eliminar y conservo inútilmente, mira por donde, me encuentro este de la rifa, tema que nunca he empleado para esto de lo de la Encarnación, que tiene por remitente una persona importante en sus tiempos de responsabilidades y compromiso con esta ciudad, ahora alejado voluntariamente de ellos. No lo he borrado, ni lo voy a hacer, algún día se lo mostraré, y seguro que será para partirnos de risa.

A una pregunta concreta sobre la actuación de un político del momento, recibí la sorprendente respuesta que hacia alusión a la rifa de la vaca, omito el texto pues ni viene al caso, pero ha sido su lectura la que me ha llevado a pensar que lo mismo que los vecinos de la casa Pumarejo hacen rifas y fiestas, para lograr ingresos que les permita aplicarlos en su mayor interés, también los placeros pueden realizar unas rifas para conseguir la cantidad que le falta a Sacyr, y que no dispone las arcas municipales, ni la asociación de comerciantes, al objeto de encargar la segunda puerta, que por su importancia incluso generaría ingresos atípicos, de poder colocar en la misma a la diosa Ceres, realizando un merchandising con la venta de las camisetas.

También se podría colocar huchas en los puestos para hacer, durante una semana por ejemplo, la colecta Pro exit et Pro introitos, es decir Pro porta, porta macellum, porta tabernaria, portal y por tal y tal, a ser posible automatica para evitar la ostia al cerrarse manualmente, como un puño, por tal motivo.

Otra posibilidad, es la que pusieron en practica hace algún tiempo en “La Boqueria”, el mercado de Barcelona que era refencia en esta ciudad antes de que el berlines se pusiera delante del ordenador, y por aquello de que setapé, y seta Platz. ¡Zas! Premio, ha tocado lo que hay que retocar cada día, una plaza para la mayor indignación y encima cabeza de manifestaciones.

Pues allí, en el mercado barcelonés, aquello es otra cosa. Un lugar donde cada día son cientos de turistas los que van a visitarlo como si de un museo se tratara, donde los placeros, ocupan un lugar, con voz y voto, en la delegación, donde el ayuntamiento cuida a estos vendedores como joyas de interés patrimonial, pues en aquel lugar, resulta que no esta permitido que nadie saque ninguna foto, por lo que de principio se les obliga a dejar las cámaras fotográficas, y pueden ser sancionado si la utilizan, salvo que realicen una aportación con la cual están autorizados a realizar cuantas fotos les venga en gana. La tarifa es de un euro. Por menos, aquí, se fundaron hermandades de penitencia.

Evidentemente no llegan tantos turistas a esta encarnación de “ruinas”, pero al menos lo mismo pasarían cuantos a diario se vuelven cuando buscan en el lugar lógico la puerta inexistente y no la encuentran.

Como idea no seria mala soltar al minotauro en el laberinto, hay gente pa tó, ¡mira que si llenamos aquello!, tal que pareciera por los sustos mercaderes, y estafeta, por el Ayuntamiento, en el encierro.

En este caso no viene al caso rifar ninguna vaca, aquella fue una actuación sui generis, que por su sentimentalismo tiene un bagaje de historia que siempre debemos de recordar con respeto y cariño, circunstancias ocurridas en un tiempo de penurias económicas, tan difíciles, que acaso estos nos lo recuerde. Pero para encontrar los mil doscientos euros para la puerta seguro que ideas no van a faltar.

Sevilla a 12 de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez

jueves, 12 de julio de 2012

Derecho




Aclara que sus estudios son en derecho, aunque en esta ocasión solo aplicara los torcidos. De una vez por todas quiere hacer la diferencia con siniestro, otra parte de los estudios para continuar en el staff.

El siniestro consejo se encuentra en el error, y para ello lo mas eficaz es salirse de la toma de decisiones, para responsabilizar en otros de la actuacion y lo mismo se aplaude el disparate en lugar de buscar, ante el nulo conocimiento, el mejor técnico para asesorar con solvencia en instalaciones de puertas, donde colocar cuantas sean para optimizar el recorrido comercial del laberinto, quedando patente comoson los estudios torcidos que se aplica en derecho.

El sueldo es el sueldo, y la cosa esta muy mala.

El consejo rector de comerciantes del mercado de la encarnación sociedad cooperativa andaluza, junto con sus asesores, dicen que en asamblea general se acordó por la minoría asistente, y fuera del orden del día, llevar a la Delegación de Consumo la petición de abrir una nueva puerta. Aun estando de acuerdo que se necesitarian algunas mas.
 Dos cositas que no encajan, una que en ese seno se debatieran las distintas propuestas, por mas que se desconoce cuantas se presentaron, y como se establecieron los criterios para el mejoramiento general o mayoritario, la segunda, reconocer que lo correcto seria que se abrieran algunas mas,  y argumentar que Sacyr, no tenia presupuesto nada mas que para una.
Y ya me dirán, que se eligiera una puerta trasera, en la zona de bares, para que se puedan colocar veladores a la calle, y obviar el interés que pueda tener su instalación en la travesía central por todos los motivos ya expuestos, lo cual nos ratifica que la asesora en trazados de recorridos comerciales, en este caso confirma, que tuvo estudios siniestros.

En este asunto de tres partes, lo mas increíble que me resulta es que todas estén de acuerdo, los placeros, en sus luces, por el acuerdo de los responsables, muy en su línea de proceder. Sacyr, por no disponer de fondos para llevar a cabo las reparaciones y deficiencias, y que este dinero no alcance nada mas que para una puerta, y cerrando el trío el delegado de mercados, Gregorio Serrano, por satisfacer la petición de los placeros sin tener en cuenta lo que en demasiadas ocasiones causa las siniestras decisiones, por mucho que nos duela, ajustadas a derechos, si en el futuro tiene que ser rectificadas por derecho.

Sevilla a 12 de julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez

miércoles, 11 de julio de 2012

Enfermedad laboral

En la provisionalidad




Una vez que los placeros en exiguo numero abandonaron la estabilidad que durante treinta y ocho años permanecieron bajo los tubulares del bidonville, llegaron los treinta y ocho, ahora en numero reducido, hasta la nueva provisionalidad en la poco a poco iran abandonando sin que ninguno alcance superar los años pasados en el rincón de chapas de eterna espera.

Esta plaza que me mata, y no solo por aquello de que la vida pasa en cada día que transcurre, no ha tenido, de entrada, nada que evite mi salida, acaso por la puerta, pero desde el primer día nada fue como en aquella provisionalidad en la que tenia treinta y ocho años menos. En esta que tan disparatada me parece, por mas que ni estuviera ilusionado con la vuelta a semejante lugar, hacia que pusiera rumbo al jubilo que se me venia encima, y acaso con el me llegara el soplo de una brisa que me ayudara a navegar algún tiempo por nuevas singladuras. Pero no había salida, ni entrada, ni publico, ni ventas, ni puerta, solo había que aguantar una crisis económica, dicen que mundial, pero que me ha cogido tan de lleno, que apenas me quedan ganas para continuar.

No ha sido solo los años, que también, pero el caso es que viendo a diario este mamarracho de plaza que se ha realizado, después de haberla idealizado con referentes que son magníficos negocios en otras capitales, diría que el coraje interior empezó a preocuparme, tanto que más que el apetito perdí el sueño, además del dinero. Luego el desagradable olor que se impregnaba en la ropa hizo que en ocasiones tuviera dificultades respiratorias, con la edad me llegaba todo menos la jubilación.

Acaso las preocupaciones y la carga de razón que me hacen ver las cosas como son, y aunque me podría valer a estas alturas, el que mas da, sigo molestando a mi estomago y este sabe darme donde mas me duele. Por suerte el corazon esta por el momento distraido y ya ni me hecha cuenta.
La edad, y sintiéndome algo mas joven de los años vividos, no es lo que puede evitar que los rástreles hayan sido colocados ,segun el disparatado diseño,  en una altura en la que ya no esta uno para estirarse de puntillas para cargar varios kilos, hicieron que en la brevedad del tiempo transcurrido por dos veces la lumbalgia me aconseja que abandone este lugar que tanto dolor me causa y no me hace feliz.

Justo hace un año un prurito apareció en una mis pierna, era como un salpullido de bebe, una ecema nerviosa, algo sin importancia que se quitaba y volvía a aparecer según mi estado de animo, según las ventas, o según que nueva avería aparecía en las deficientes instalaciones de diecisiete millones de pesetas. Aparte de la puerta, y los carteles reivindicativos, las luces prohibidas, la reflexión solar, la pileta cambiada, los rástreles altos los mostradores mas altos, los husillos interiores, el fenólico que se despega, la prohibición de estacionar mi vehiculo, los rótulos, las cajas decoradas, y encima primero las gotera, el hilo musical interior, el termo se salía, la pileta rompió el bote sinfónico, la cámara tuvo que cambiar el evaporador, la vitrina no enfriaba, las puestas quedaron obstruidas, y encima la calle permanecía desértica.

El caso es que la piel empezó a mostrar su parecer y exigía una tranquilidad que no le daba, ni le doy, y a los seis mese el dermatólogo diagnostica psoriasis. Un coñazo de cremas, algunas pastillas, que hace que según el día aparezca mejor, o lo contario.

Cambio de tratamiento, y diría que empeoraba,. Nueva visita al dermatólogo que decide hacer algunas pruebas, psoriasis es el diagnostico, pero tambien otra cosa, que para estar mas seguro hace falta una analítica extensa, tanto como la enrojecida piel invade las piernas.

Ahora ha cambiado el diagnostico, otro nuevo, mas parece que sea debido a una mala interrelación por la mezcla de medicamentos, para el stress, para la psoriasis, el protector, y los analgésicos y antiinflamatorios para aliviar la lumbalgia, y también puede ser, obviaré el nombre medico, un problema que puede surgir cuando se trabaja en lugares cerrados, mal ventilados, y aparece en el ambiente partículas odoríficas que me están jodiendo.
Aun no están los resultados de las pruebas y análisis, por el momento ha retirado todas la medicaciones y tengo prohibido hasta el paracetamol, a cambio, y esperando los resultados, prescribe me dispensen corticoides para veintiún días, como medida de choque para salir de esta situación, lo que yo digo, una puerta, al menos entrará por ella el aire renovador, y el publico y lo mismo me devuelven las ganas de seguir, o entra alguien que quiere generosamente jubilarme. Puedo decirle que estoy hasta los cojones, y crean que me he hecho fotos.
Por suerte no ha venido el recibo del alquiler, con lo cual lo mismo la cortisona ha empezado a obrar, la puerta a la esperanzadora mejoría.

Sevilla a 11 de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez

martes, 10 de julio de 2012

E pluribus unum
(Jurgen, Mariano, Gregorio, Paco)

 La PUERTA




He leído no se cuanta veces el magnifico articulo  sobre el asunto de la puerta de la Encarnacion, que  hoy firma A.S. Ameneiro en Diario de Sevilla. Es sencillamente magnifico. Deja las preguntas, que no hace, para que se las formule el lector.

Sin duda los datos se los han facilitado algún representante de los placeros, vaya tela marinera del telon, pero cuesta  pensar que sea cierto lo que dicen, (que cierto esta lo escrito), cuando manifiesta aquel que en la ignorancia afirma que Sacyr, solo tiene presupuesto para instalar una sola puerta. ¡Será por dinero!

Todo parece indicar, según informa, que la directiva acordó esta decision en asamblea de los placeros, al parecer fuera del orden del día, donde en la minoria de asistentes se debatieron  las  supuestas propuestas existentes, (por lo escrito en el acta que elaboraron), cual seria la propuesta elegida, ignorandose los criterios de seleccion que no se incluyeron el el acta.. Ustedes mismos.

Es muy interesante eso de disponer alegremente donde colocar una puerta, una sola puerta, aun reconociendo que por la mala distribución de las existentes, (cuatro en un sinuoso pasillo, y dos, en una entrada muy distante no solo de la cegada travesía central, si no del resto del mercado) y mas aun, que sean los placeros, acompañados de la asesoría, al parecer tecnica en recorridos, los peticionarios al Sr. Serrano, de la colocación precisa de la puerta que se solicita, y además, detenerse en la declaracion a los medios, con la explicacion de argumentos increíbles sobre los supuestos beneficios que una vez se inaugurada, abundaran al conjunto de la plaza de abastos, donde, y leo textualmente “ será una puerta TRASERA para abrir acceso a los bares del mercado con idea de ampliar su clientela, y que puedan tener veladores en la calle”. Continua que la Concejalía que gestiona el Sr. Gregorio Serrano y la Concesionaria de Sacyr, que la representa Mariano Peláez, han accedido a colocarla. ¡Faltaría más!

Crean que también a mi, personalmente, me dieron otras respuestas. Así que nadie se pudo enterar de la propuesta debatida por los placeros, que nunca se les realizó a estos, pues aparte de pedírsela en principio a Jürgen Mayer, con respuesta que no viene al caso, y también a su equipo técnico, que no tenia inconveniente en la minima modificación que esto causaba, solo fue pedida de forma verbal, privada, y por mail a Mariano Peláez, y este que no tenia inconveniente, y por supuesto que ningún problema financiero para instalar una puerta, que debería de autorizar la delegacion de mercados, por lo que me remitió a Gregorio Serrano, digo que este, tras entrevistarse con Sacyr, incluso me confirmo que se iba a proceder a colocarla, pues el sentido común, y las muchas personas que la buscan a diario, parecía que eran argumentos suficientes para la elección del lugar correcto.

Pero debe de ser la envidia, o acaso algo peor, para llegar a afirmar que no es el lugar apropiado, cuando la puerta lateral, en cuestion  siempre tuvo argumentos de beneficio colectivo, que se solicitaba para evitar tanta confusión en el publico al objeto de darle sentido a una travesía central que ni dispone de puertas de seguridad, prevista en la parte Este, que tampoco colocaron, y encontrar una excelente ubicación para entronizar a la diosa Ceres, y exigiendo que la puerta fuera automática, para posibilitar el acceso a las personas de capacidad reducida, (que además es obligatoria), por lo cual, abriendo esta puerta en la fachada de poniente permitiría el transito por la calle que mas puestos tiene en su radio de acción,  pues ninguna alcanza a los que serian doce puestos que tendrían influencia directa.

Que bajeza mas grande la de una directiva, posiblemente hasta asesorada, por cierto muy mal, en recorridos comerciales, que ha visto que la puerta en cuestión, según sus cortas luces, me beneficiaria. Evidentemente, y ¿quién lo duda?

Sevilla a 10 de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez

lunes, 9 de julio de 2012

El drama se hace comedia
(Hay que reirse)

Es puro llanto




La lagrima en el capricho se está volviendo puro llanto, ¡Dios mío, Dios, mío! Que risa causa el espanto. En el Tholo de Mamaria, el que no llora no mama.

Por el momento, sin puerta, aquello no tiene salida, ni respuestas. Nadie parece que sepa nada del asunto de la puerta, ni del asunto, ni de la puerta, es evidente que existe la ignorancia.

Llama la prensa interesada en el tema, pues más que serpiente de verano, lo de la puerta de la Encarnación es un culebron venezolano, y la historia da para una serie experimental, más propia de la conjetura de Poincaré, que del boson de Higgs, la puerta de los deseos. La escusa, según dice la portavoz es el dinero, según el responsable, los placeros, según la concesionaria el delegado, puro llanto.

En el dramatismo que causa ver el laberinto en la oscuridad de los silencios de los lunes, apenas daba la jornada para tener sorpresas, pero en el fanal puede ocurrir lo inesperado. El pequeño grupo llega en bicicletas, sus componentes buscan la entrada en la barreduela de cristal, un lugar aplaudido por aquello de reír la gracia por el ingenio demostrado de su ocurrente autor. Cuentan que tanta modernidad es pura poesía, de haber sido "espuria", no quedarían lágrimas para tanto llanto.

No parece que la tragedia alcance al grupo de baile, pues solo buscan una localización para llevar a cabo su número, y naturalmente que nada mas apropiado en cuestión de números que este que encuentran en una Encarnación sin salida, y sin entrada.

Se trata pues de un numero musical, un arduo trabajo del que esperan obtener resultados satisfactorio. La cámara recoge varios planos del tholo de cristal, desde dentro y desde fuera, toda una vuelta. ¿Dónde está la puerta?

Ni que pintado, pues se trata de una coreografía en el que las vestales de un templo hacen un ritual ante una diosa. Bingo.

De lleno me meto en el asunto y planteo que nada mejor que hacer una reivindicación de la Diosa Ceres, a la que podía entronizarse en el lugar que les indico, si, el mismo que ya tanto la responsabilidad como los técnicos conocen.

Y en el exterior las vestales, y algún que otro figurante, traten de penetrar hasta alcanzar la protección de la diosa que se mantiene erecta y quieta, en todo momento, dentro del fanal, que tratan de cruzar los afligidos por el dolor de no encontrar la entrada, y empujan con sus manos los cristales que quedan manchados con la sangre de la desesperación.

Los artitas quedan encantados, pues era algo así lo previsto pero tenia que ser un poco más erótico. Les informo que la Diosa Ceres, diosa de la abundancia, también lo es de los placeres, y se representa en un desnudo integral que tapa sus vergüenzas con una cesta de alimentos, pero lo mismo pueden ser pollos, que nabos y pepinos, incluso un buen chorizo. Seria la erótica de la alimentación, con almejas, nísperos, y huevos.

El grupo de teatro se siente entusiasmado, tanto como si ya estuvieran actuando. Aparece entre ellas una invitación a participar, me piden que actúe, acaso me pregunto interiormente si quieren que en mi papel me encuentre dentro del laberinto como un minotauro, o peor aun, aparecer dentro del puesto estático, mas que como un jamón, como escultura que sostiene un enorme pernil, y la muchedumbre fuera, lampando grita y vocifera, para poder entrar y reclamar alguna lagrima de su pringue.

Declino la amable invitación que me formulan estos jóvenes actores y actrices, temiendo que me pidan que interprete el papel de Príapo. Dios de los mercados. Seria para llorar, pues uno, ya no esta para eso.

Sevilla a 9 de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez

sábado, 7 de julio de 2012

Calle de Regina
Plaza, ancha y callejuela

Ancha




Hasta hace unos años, en los que entre caprichos y silencios se propusieron construir esto de lo de la Encarnación, ¡Ay Alameda! apenas nada habia cambiado, y solo el solar esperaba para reconstruir la plaza, según se prometió al derribarla.

Eso que era de los tiempos de Franco, al parecer era algo de suma importancia, según los responsables socialistas del momento, para volver a ocupar el lugar en el mundo, no en vano de nuevo le llamaron ciudad de las personas, cosa que debió ser por aquello de tropezar tantas veces, y quien dice que no fuera por la hipnosis plenaria, de los plenos, que coincidieran tanto sueño.

Hasta entonces, subiendo por la callejuela, hasta alcanzar la ancha de Regina, mirando hacia el sur interminable, se podía contemplar la parte superior de la Giralda, icono de esta ciudad soñada, que no dormida, y que fuera inspiración de tantos artistas.

En la actualidad, cuando se llega a la calle ancha, (un inútil intento de llevar a cabo el eje que llegaría hasta la resolana), el gris de las losetas de granito, en gran parte destrozadas por inadecuadas, los amorfos parterres de una vegetación sedienta, una fuente bulto, de esas modernas que solo deja caer a los transeúnte en lugar de chorros de agua, y un curvo banco de cantería, tan sevillano, tan propio, hace olvidar que ya no puedes divisar, al amanecer, la torre del color de caramelo.

Calle ancha de Regina es la viva imagen del desastre llevado a cabo por una actuación desproporcionada, por mas que el deterioro no empieza con la crisis económica actual, ni tan siquiera con el concurso de ideas, que permitió impedir que otra idea prosperara, esto llevaba para treinta y tres años cuando le metieron la mano.

Mucho tiempo para resistir en la provisionalidad eterna. Evidentemente se pudieron hacer muchas cosas, incluso un magnifico mercado, y con seguridad todas mejores que esta cosa, que en lugar de crear riquezas en el sector, solo se producen cierres. Salvo bares, que siendo (mientras asomaba la Giralda) zona saturada de bares y ruidos. Con las setas tienen bendiciones, vamos que hasta se hacen eventos de todo tipo con barra y selecta neveria.

Se calcula que hasta ocho mil espectadores presenciaron en la plaza de la mayor indignación, la de los usos perroflautas, y cabeza de pancartas, la final de la roja, todo un éxito de la privatización, para hacer buena la frase el edil cuando afirmó aquello de que “con el tiempo aquello, (dijo las setas) quedara´integrado en la ciudad”.

Una predicción digna del “onfalo”que guarda la piedra de tropezar, cual si fuera oráculo de Delfos que lo mismo podía ser del responsable Pito, que no fue” reo”, en este caso de sus palabras, estando el éxito popular en los orines de los amaneceres.

En ancha de Regina todos los locales de la acera izquierda permanecen cerrados, incluso los de la fachada Norte de la Encarnación.

Las feísimas farolas de báculo no hacen más que incrementar en la vacía calle los obstáculos. Hay mas cosas por medio que paseantes. Veladores, parada de bicicletas, contenedores, y puntos de reciclajes.

El tenderete de las vendedoras de cabrillas, y la que pide limosna, nos hace presentir que por algún lugar se debe de encontrar lo que era la plaza de abastos. El fuste reparcheado en la base, se adelanta en la deformada plaza a la desproporcionada escalinata de granito, donde las curvas impiden comprobar si aquello esta hecho así de mal, o ha sido cosa intencionada.

Una barandilla protege dos plantas de cactus en un parterre redondo que hace las veces de un remate, de un adorno asimétrico y descolocado, lo suficiente para que se empiece a entre ver lo que llaman puerta norte, y que da acceso a un pasillo sinuoso, un lugar dificultoso donde reciben la bienvenida con un chorro de aire caliente cuantas personas encontraron que estaba aquello abierto, pues al ser calle privada, plaza privada, vista socializada, museo en concesión, zona de ocio, y mercado municipal, lo mismo ya ni le importa a nadie, que cuando se llega a calle ancha de Regina, una cubierta de cuadriculas de conglomerado de maderas, le impida ver los cielos.

Al menos los vuelos de cortejo de los pájaros, pueden hacer de aquello una reserva ornitológica en el futuro a falta de arboleda. En la calle ancha ancha de Regina, las palomas y las tórtolas buscan su pan, y los chatarreros lo que encuentren, todo ha cambiado tanto, que ni intente buscar la Giralda, seria como si buscara una puerta.

Sevilla a 7 de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estevez

miércoles, 4 de julio de 2012

Peros

De pena




Me parecía impensable que algún día llegara a creer más al rumor que a la palabra de un responsable, en lo de la Encarnación.Pero nunca se sabe.

Me complacerá asistir a la inauguración de la puerta sea en el lugar que sea, aun en el elegido, que ya de por si resulta disparatado, pero eso corresponde al tiempo decirlo.Pero si es por la tarde.

El rumor, que por los acontecimientos es documento verbal, tal como en otro tiempo lo fue la palabra, que no tenia que ser mas que hombre, por supuesto de palabra, o en su defecto palabrita, pero de Niño Jesús. Pero si se es todavia un niño, aunque tenga apariencia de hombre.

En lo de la puerta no merece la pena contar para nada las palabras que se dieron, antes documento, incluso cuando fuera palabra pendiente de un hilo, y no precisamente telefónico. Palabras de promesas en la victoria, palabras solidarias en la derrota. Peros,simplemente fueron peros.

Le podíamos haber llamado puerta de las palabras vacías. Creo que la que el rumor inaugura para San Fermín, se llamará del rincón, pero acabaran diciéndole de pena, por aquello de que muchos advertirán que fue una pena, porque en el vaticinio tiene ese puntito oscuro, de pared de hormigón, que incluso puede parecer la calle mas de pena, que comercial. Pero lo mismo con unas luces, una buenas luces, hasta mejora.

Con la caoba en la mano y los guantes cuero negro, tal como exige el protocolo, la respuesta era esperanzadora,” ¿Pero como?, si eso ya está hecho”. (Palabra de comitiva.)

“Amigo Paco, para decirte que lo de la puerta se va a realizar de inmediato”, (palabra de orange)

“¿Y si colocamos una de las del otro lado, en lugar de la automática?”, “es que tardará pues hay que encargarla en Alemania”, “palabra mirando a los ojos”

“¡No te preocupes!, ya esta todo conforme y de acuerdo”, (palabra de mediador feliz) Palabras, palabras. Cientos de palabras, para rubricar cientos de contratos verbales, que debe de ser como promesas de candidatos, de las que no se cumplen.

Luego vinieron otras palabras, después de demasiado tiempo, palabras sin sentido para desdecir las anteriores. Un tiempo perdido, casi dos cosechas sin recoger los frutos que se esperaban de las palabras dadas, esas que hace siempre prisioneros cuando alegremente son ofrecidas.

A fructibus cognoscitur arbor, y al de las palabras vanas, evidentemente no se le puede pedir peros, pues resulta ya conocido que lo que ofrece son otros peros, peros de pena.



Sevilla a4 de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez





martes, 3 de julio de 2012

Entender, o no entender


Inexplicable

Resulta que al igual que aquella pareja de italianos vino para conocerme, no diré expresamente, pero que buscando información sobre nuestra ciudad encontró mi blog, y mira por donde se convirtieron en “seguidores”. Cuestión de gusto.
También Kondo, japonés, profesor de español en su país,  y que tuvo la ocurrencia de colocar un texto que le escribí cuando tuvo que volver a su casa, y que sirve para impartir clases de español, según vino recientemente a contarme, y mas aun, que utiliza las paginas de mi blog, para aplicarlas en su aula avanzada. Ni me lo explico, pues en ocasiones ni me entiendo.
Esta vez ha sido un sevillano, septuagenario y afincado en Cataluña, quien me envía  un mail, avisándome de que tiene que realizar asuntos en Sevilla, donde tiene casa familiar, y que con seguridad vendrá acompañado por su esposa e hijos, y  tiene interés especial en conocerme. Dice que me ha leído, (cosa que ya me resulta inexplicable) las novecientas entradas que no puertas que tengo en el blog, pues lo de la puerta es lo que a este (desconocido lector) lo que le resulta inexplicable.
No lo que de  mil maneras, cada día, sobre lo de la Encarnación, misterio inexpugnable, envío a mis lectores, que también los tengo que me borran sin leerme, (con lo fácil que me seria borrarle a ellos del directorio) a mi fiel lector, sevillano septuagenario, y afincado en Cataluña, persona culta, por cuanto es capaz de “ver” el contenido contenido, de los escritos, y me transmite  como lo que lmas le sorprende  sea que el concejal de mercados, la concejala de cultura, la de casco antiguo, el concejal de participación ciudadana, todos ellos  por la parte de los munícipes, y por la otra parte, la contratante, que desde el mas responsables de los responsables de la concesionaria, pasando por el responsable de la edificación metropol-parasol, por el equipo técnico, hasta llegar a los encargados de mantenimientos y servicios, así como a todo el personal auxiliar, y por ultimo, como los vendedores que aun quedan, soportando en su narcosis del buceo micologico, sin advertir la profundidad de algunas deficiencias, que no suman nada, solo sustraen, como puede ser la falta de ventilación natural, las salidas de aire caliente en el pasillo, la absurda ubicación de las entradas, que no puertas, que esas son simplemente de caprichosa colocación, en un sinuoso pasillo de locales muertos. Todo hace indicar que inexplicablemente nadie se ha dado cuenta, salvo los cabreados clientes que será menester raptarlos, de la imperiosa necesidad de colocar una puerta automática, cosa que llevo inútilmente pidiendo desde el primer momento inaugural, pero muy especialmente en el lugar que permita la entrada a una travesía central cegada, y a una calle desértica y anticomercial, donde en un lugar tan moderno, que resulta por los miles de estudios aplicados, cuando menos cobrados, inexplicable que no se encuentre la puerta que el sentido común básico en la orientación conduce de manera  elemental a propios y extraños.  Cuando menos de seguridad, y de emergencia. Es como las fotovoltaicas, obligatorio.
Mi estimado lector, sabedor por los años,  utiliza otros calificativos para describir tanta ineptitud, como para que algo no se haya podido resolver con todo el tiempo que transcurrió desde la inauguración de la fase plaza de abasto. Dice que le resulta inexplicable, por el contrario estoy convencido de que todo tiene su explicación, mas pienso que no saben, darla.
Sevilla a 3 de Julio de 2012
Francisco Rodríguez Estévez 

lunes, 2 de julio de 2012

Si no es picante, es una guarreria

Ilusión



Dice mi viejo diccionario, ese que tengo tan pintarrajeado que ni me explico como se atreve a darme respuestas, que ilusión ,es una palabra que puede tener cuatro significados.

Los dos últimos son tan absurdos que mas que ilusión parece tontería, pues que tendrá que ver ilusión con “cosa picantona”, que sé yo, lo mismo esta aceptación académica nada tiene que ver ni con las papas a la brava, ni con el tabasco, y es algo mas profundo, como una ilusión. Que malo puede haber en hacerse ilusiones, cuando hay cosas peores.
La primera definición la describe como algo sin verdadera realidad,  algo que es sugerido por la imaginación, o causado por el engaño de los sentidos. Una pena, pues su origen esta en el error, y ni se imaginan la ilusión que me hacia lo de la puerta.
La segunda dice así: “esperar algo, cuyo cumplimiento parece especialmente atractivo”, y ahí se llega a confundir error con horror.
Viene a ser como lo de la puerta, una ilusión en la desértica calle, una fata morgana, que hacer ver el horror del error, y como las responsabilidades, en el error de la ilusión crean el horror, pues la ilusión, (como la puerta), no existe, y los que la buscan, no te veas cuando se dan cuentan de que cayeron en el error, como  largan horrores.

Hoy desde la ventana, la gran ventana que me asoma al poniente, la ventana del laberinto, mirando al tholo de Mamaria, que no es la guarreria, si no el lugar donde me hice el error de entronizar el horror de una Diosa protectora, con una ilusión que solo era, como dice mi diccionario, otro error más en esta Encarnación de los errores.

Pues allí, que ni decir tiene que mirar desde el horror vacui del interior a la calle exterior, la sesnsacion se asemeja a algo en la nada, como al gran vacíoen su soledad, como una dolorosa traspasada de tanta modernidad. Algo tan increíble que de no pasar nadie, en un recorrido de muchos metros, en el centro de la ciudad, y contemplar sin destempalza, que durante algunos minutos sin que transitara un alma, solo pude ver a dos señoras mayores, ambas en carritos eléctricos, ese que con suerte alguna vez puede que nos toque conducir.
 Una, la de dorados cabellos venia del vector de poniente  de “la venera”, acompañada de una mujer joven de tez morena, posiblemente de allende los mares, la otra, que lucia el blanco de un pelo cuidado en peluquería, tenia en su porte como un toque de distinción, acaso una ilusión, un error, y provenía como de la Anunciación, tal vez de Laraña, y aunque conducía sola, no lo hacia de forma temeraria pues, aun sin trafico, ni de coches, ni de motos, ni bicicletas, ni tan siquiera de personas, no aceleró su especialísimo medio de transporte, ya que llevaba ritmo de batería baja.

Ninguna de las dos, únicas personas, de haber intentado entrar en el laberinto de la llamada plaza municipal de abastos, le hubiera sido posible sin ayudas, por lo cual, en ambos casos, no hizo falta, se marcharon tal como llegaron hasta el error de una puerta inexistente.
Acaso por el olor que allí se concentraba al secarse los orines producidos en el evento nocturno en la "plaza roja".
Pero el error de su ilusión por entrar en la plaza, la de abastos, sería por dar una vueltecita, lo cual las llevó a coincidir en la sabia decisión y alejarse de aquel error, que tanta ilusión podía haberle hecho.
 No puede existir mayor error, que hacer creer que una puerta puede ser una ilusión, ni mayor ilusión que hacer una puerta para terminar con el error, ni hacer creer que la puerta es un error, y la ilusión una cabalgata. ¡Ya vienen los Reyes!, Estoy por pedirles un error, otro mas de esos que cuando gano pierdo, esta vez intentare perder, me hará ilusión ganar, y lo mismo, de tanto beneficio, se me olvida el error de lo de la puerta, pues ha quedado evidentemente claro que no era cosa de gobernanza, pues ha quedado demostrado que solo era una ilusión. Cosas del picante.

Sevilla a dos de Julio de 2012

Francisco Rodríguez Estévez